Enfrentó con claridad moral a Daniel Ortega, llamó “grosera” a su dictadura y alzó la voz en defensa de una Iglesia perseguida, sacerdotes encarcelados y un pueblo bajo represión.
Estados Unidos ha lanzado cuatro mensajes claves al régimen desde el regreso de Trump a la Casa Blanca. Sanciones, advertencias comerciales, aranceles y acusaciones de amenaza a la seguridad nacional marcan la estrategia.
A través de una nota de prensa firmado por los dictadores Ortega y Murillo, califican al gobierno de Noboa en Ecuador como una "dictadura servil" y "un Estado fracasado".
El ministro español de Exteriores dijo que el ofrecimiento de la nacionalidad a los excarcelados también es extensiva a sus familiares de primer grado.
El encargado de la diplomacia estadounidenses para América Latina reconoce que había “profundas diferencias” con Humberto Ortega a tres días de su muerte.
El exjefe del Ejército narró su trágico desenlace en un audio que compartió en secreto a Confidencial y que sirve como prueba fehaciente de que su hermano, el dictador Daniel Ortega, es el responsable de su muerte.
El exjefe del Ejército de Nicaragua cargó hasta el final de sus días con varios crímenes en los que se vio involucrado durante la década de los 80. Los detractores del sandinismo pidieron que se le juzgara, sin embargo nunca se le imputó ningún delito.
La orden se da por el uso que la dictadura hace de Nicaragua para facilitar la trata de personas, particularmente de migrantes que buscan llegar a Estados Unidos.
La comandancia del Ejército lamenta el fallecimiento del general en retiro, pero no critica las condiciones a las que fue sometido y las acusaciones de la dictadura.