De esbirros a desechos de la dictadura: estos son los comisionados purgados de la Policía

Fueron utilizados para reprimir al pueblo, se convirtieron en esbirros y fueron apartados, la mayoría por órdenes de Rosario Murillo: estos son los 12 jefes de la Policía caídos en desgracia.

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Despacho 505
  • Managua, Nicaragua
  • marzo 05, 2025
  • 10:34 AM

Desde 2018 al menos 11 comisionados generales y una primera comisionada han sido apartados de la Policía Orteguista. Fueron esbirros de la dictadura y apartados de la noche a la mañana sin el más mínimo agradecimiento. Unos han caído envueltos en escándalos de corrupción “no autorizada”, otros por portarse “blandengues” en la represión y otros por discutir con la codictadora Rosario Murillo.

Los usaron, los lanzaron contra su pueblo, los convirtieron en las figuras odiadas por la población por ser las caras visibles de la represión, encarcelamientos arbitrarios, tratos crueles y degradantes contra presos políticos, asesinatos, destierros… Unos han sido encarcelados, otros enviados a retiro y de otros ni siquiera se ha informado oficialmente su salida.

Aminta Granera

El 23 de agosto de 2018, cuando aún en el país resonaban las balas disparadas por policías y paramilitares en la llamada “Operación limpieza” para acabar con las protestas contra el régimen, el dictador Daniel Ortega inició una purga en la Policía. 

En La Gaceta, Diario Oficial, se hizo oficial el retiro de la primera comisionada Aminta Granera como directora de la Policía.

Aminta Granera fue nombrada directora de la Policía el 4 de septiembre de 2006, por el entonces presidente Enrique Bolaños para un periodo de cinco años, pero al cumplirse ese periodo, ya con Ortega en el poder, éste  la mantuvo en el cargo. 

Aunque su retiro de la Policía se hizo oficial en el mes de agosto de 2018, se dice que habría renunciado desde el 28 de abril, 10 días después de iniciadas las protestas contra el régimen.

Adolfo Marenco 

En el escalafón de mando, el segundo jefe principal de la policía que cayó víctima de las purgas fue el poderoso jefe de investigaciones y encargado de la “inteligencia política”, comisionado general Adolfo Joel Marenco Corea.

Por muchos años fue el encargado de vigilar, investigar y perseguir a dirigentes opositores. Era el ojo omnipresente de la dictadura contra la disidencia. Además, integró el núcleo de mando en la toma decisiones para la represión de 2018. Siempre se mostró fiel a los dictadores, pero nada de eso le valió a la hora de enfrentar la guillotina.

Sobre el retiro de Marenco han circulado varias versiones: rebelión contra sus jefes, a los que ya no quería servirles, colaboración con Estados Unidos, conspiración para investigar negocios del Ejército y finalmente actos de corrupción no autorizados.

El 16 de noviembre de 2022 lo enviaron a la comisión de servicio al Instituto de Seguridad Social y Desarrollo Humano (Issdhu), pero eso solo era el preludio de su caída. Seis días después, Ortega firmó su salida de la Policía. Fue enviado a su casa y unas semanas después, enviado a las celdas de El Chipote, a las mismas donde envió a decenas de opositores para ser torturados.

Medios de comunicación independientes revelaron que el jefe policial estaría involucrado en una red de tráfico de cigarrillos que le habría dejado más de 8 millones de dólares en ganancias. Es a lo que le llaman “corrupción no autorizada”.

Marcos Alberto Acuña Avilés

Muy cercano a Ortega en los últimos 25 años. Cuando Ortega andaba en campaña en 2006, era aún capitán y en menos de seis años llegó al máximo grado de comisionado general. En teoría, estaba en la línea de sucesión para ser director general de la Policía. 

Se desempeñó como jefe de escoltas presidencial y guardaespaldas personal de Ortega durante más de dos décadas.

Después de estar al servicio de la seguridad personal de Ortega, Marcos Acuña fue acusado de desobedecer "flagrantemente órdenes superiores, poniendo en riesgo la seguridad ciudadana", según una nota de prensa policial. 

Se dice que en realidad discutió con la codictadora Rosario Murillo, a quien no le quiso acatar una orden.

"En consecuencia y de conformidad a lo establecido en la Ley 872 (Ley de la Policía Nacional) y sus reformas se le impuso baja deshonrosa y será juzgado por el delito de incumplimiento de deberes, desobediencia e insubordinación", informó la dictadura. 

Pedro Rodríguez Argueta

El 5 de junio de 2023 se conoció que el comisionado general Pedro Rodríguez Argueta fue destituido de su cargo como jefe policial de Masaya.

Para el 2018 fue conocido como “El torturador de Carazo”, ya que era jefe de esa plaza cuando los paramilitares y policías ejecutaron la “Operación limpieza” que masacró a los protestantes de ese departamento, con un saldo de al menos 20 muertos.

Varios testimonios de sobrevivientes de Carazo señalan a Rodríguez Argueta como uno de los jefes de la represión del 8 de julio de 2018. 

Tras su salida de Jinotepe, estuvo en la Dirección Nacional de Seguridad Pública, luego en el Triángulo Minero y finalmente en Masaya donde fue apartado 20 días después de su nombramiento.

Luis Barrantes

Su último cargo de peso dentro de la Policía fue como jefe departamental en Matagalpa. Fue ascendido a comisionado general en septiembre de 2015. 

Había llegado a Matagalpa procedente de Masaya, pero solo duró tres meses.

Fue apartado de la Policía y enviado como jefe al Sistema Penitenciario Nacional, en la práctica un castigo para alguien que ostenta el cargo de comisionado general.

Juan Valle Valle

El comisionado general Juan Valle Valle fue removido de la jefatura policial del municipio de Ciudad Sandino, del departamento de Managua, según información filtrada a DESPACHO 505. Fue apartado por “pugnas de poder” con autoridades del Frente Sandinista. 

El último cargo de Valle Valle evidencia su caída en desgracia pues ostenta el segundo más alto grado policial, el de comisionado general, ha ocupado cargos de jefe de dirección nacional y de departamento, pero ya estaba ocupando cargo de jefe de un municipio, nada qué ver ni con sus cargos anteriores ni con su grado policial. 

Juan Valle Valle está sancionado por Estados Unidos desde marzo del 2020 por ser uno de los jefes policiales que dirigió la llamada "Operación limpieza", para desmontar a balazos las protestas cívicas del 2018.

Aunque no se ha anunciado su retiro oficial, tras su destitución en Ciudad Sandino no se le conoce un nuevo cargo. 

Luis Pérez Olivas

También está sancionado por Estados Unidos, la Unión Europea, Suiza y Reino Unido por violaciones de derechos humanos. Fue el jefe de la temida Dirección de Auxilio Judicial (DAJ) por donde pasaron centenares de presos políticos golpeados, interrogados y aislados bajo un esquema de tratos inhumanos que ha sido denunciado a nivel internacional.

En junio de 2023 fue destituido como jefe de la Dirección de Auxilio Judicial. Su salida fue ordenada por Rosario Murillo y se hizo efectiva por la resistencia que éste puso a ocupar el cargo de jefe de la delegación policial del Distrito III de Managua.

Luis Alberto Pérez Olivas tiene 67 años y desde joven se integró al FSLN en tareas de conspiración contra la dictadura de Somoza en el Occidente del país. Es señalado de cometer secuestros, torturas y ejecuciones contra los opositores que se alzaron contra Ortega.

Fidel Domínguez Álvarez

Es uno de los más recientes purgados. Fungía como jefe en la delegación policial de León, y está involucrado en la represión contra las protestas de 2018. 

Comandó acciones represivas, entre ellas, el ataque contra el personal de Radio Darío, emisora independiente incendiada en 2018.

En 2020, el Departamento de Estado de Estados Unidos incluyó a Domínguez Álvarez en la lista de personas sancionadas “que fomentan los ataques” del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo contra la democracia de Nicaragua.

Su purga fue confirmada este domingo 3 de marzo sin explicar los motivos.

Jaime Vanegas

Hasta su salida era el inspector  general y vocero de la Policía. Se dice que era muy  cercano a la codictadora Rosario Murillo. Formó parte del núcleo de toma de decisiones para reprimir las protestas sociales de 2018, por tanto, sería responsable directo de los crímenes cometidos por la Policía. 

Su salida se produjo 48 horas después de ser presentado en el cargo de inspector durante el acto de juramentación del primer comisionado Francisco Díaz el viernes pasado en Managua. Tampoco se explicó el por qué de su purga.

Horacio Rocha

Comisionado general en retiro, fue llamado a las filas por Ortega en diciembre de 2022 cuando le encomendaron ejecutar la más grande purga política ordenada contra el Poder Judicial y otras instituciones del Estado. 

Obedeció con rigor y purgó a cuanto funcionario le señalaron sus jefes. Mandaba en la Policía y le apodaban el “súper ministro”. Sin embargo, cayó en desgracia, supuestamente por órdenes de Murillo que no le perdonó que husmeara en negocios de sus hijos. Tampoco ha sido destituido oficialmente pero está desaparecido de las actividades oficiales donde nunca fallaba. 

Sergio Gutiérrez

El comisionado Sergio Gutiérrez fue el encargado de dirigir el encierro, la detención y el traslado a Managua de monseñor Rolando Álvarez y de los religiosos y laicos que permanecieron sitiados durante 16 días en la Curia Episcopal de Matagalpa en agosto de 2022.

La caída de Gutiérrez se le atribuye a Murillo, quien lo habría señalado de haber sido “blandengue” en el trato hacia el obispo.

Gutiérrez intentaba sortear la sacudida de la vieja guardia policial que desde hace meses mantiene en zozobra a los jefes que se saben en riesgo de perder sus cargos, por la vía del retiro. No lo consiguió. El puesto que ocupaba como jefe de la Dirección  Nacional de Investigaciones Económicas y en el que no llegó a cumplir ni seis meses lo entregó en julio de 2023.

Oswaldo Pérez Woo

Se desempeñó como jefe departamental de Granada. DESPACHO 505 conoció que el comisionado Oswaldo Pérez Woo fue destituido el 9 de abril de 2023 tras caer en desgracia por permitir que feligreses realizaran actividades  religiosas en algunos sectores  del departamento de Granada durante la Semana Santa de ese año.

Oswaldo Pérez Woo fungía como jefe policial de Granada desde el 17 de febrero de 2022. Antes ostentó el cargo de jefe de  la delegación policial de la Región Autónoma de la Costa Caribe Norte. Su salida de la Policía se confirmó en junio de 2023.

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