Marco Rubio excluye a Nicaragua y Honduras de su gira por Centroamérica, ¿una mala señal para Ortega y Murillo?

El nuevo secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio inaugurará sus viajes diplomáticos la próxima semana con una gria por Centroamérica. Es un recorrido por los países Cafta, excepto Nicaragua y Honduras, según el itinerario anunciado el jueves la portavoz del Departamento de Estado, Tammy Bruce.

En este primer viaje, el jefe de la diplomacia estadounidense aterrizará en Guatemala, El Salvador, Costa Rica, Panamá y República Dominicana. La exclusión de Nicaragua y Honduras es una mala señal para Daniel Ortega y Rosario Murillo, opina el dirigente opositor y exreo político Juan Sebastián Chamorro.

Chamoro considera que la diplomacia de la administración Trump será particularmente dura con los regímenes totalitarios y es por eso que en la gira de Rubio quedaron fuera Honduras y Nicaragua.

Según Chamorro la política exterior estadounidense no va a buscar ningún tipo de acercamiento con las dictaduras de la región. opina que tampoco intentará ejercer presión sobre esos regímenes por la vía diplomática sino con métodos  más duros "incluyendo el comercial" .

La advertencia del dirigente opositor hace referencia a la importancia del comercio entre Nicaragua y EE.UU: que es el primcipal mercado para el país centroamericano, sobre todo bajo los terminos preferenciales que ofrece el Tratado de Libre Comercio entre República Dominicana, Centroamérica y Estados Unidos (CAFTA-DR, por sus siglas en inglés). 

De hecho, la reciente investigación iniciada por Estados Unidos sobre las políticas y prácticas de Nicaragua en materia de derechos laborales, humanos y el estado de derecho podría conllevar riesgos significativos para la participación de Nicaragua en el CAFTA. Expertos señalan que esta investigación podría ser el preludio de sanciones más severas, incluyendo la suspensión de Nicaragua del tratado, lo que afectaría negativamente las exportaciones y el empleo en sectores clave como las zonas francas y la agricultura.

Positivo para Centroamérica, mal síntoma para Nicaragua

Los opositores Eliseo Núñez y Héctor Mairena coinciden en que es muy relevante para Centroamérica que Rubio haya decidido inaugurar sus viajes como nuevo secretario de Estado en esta región de América. Es revelador y alentador, apuntaron.

“Nos anima que el secretario de Estado comience su mandato, en (gira por) Centroamérica; significa que hay especial interés en la región”, valoró el abogado opositor y miembro de la vocería colegiada de la Concertación Democrática Nicaragüense (CDN-Monteverde), Eliseo Núñez.

Por otro lado, Núñez opina que la gira centroamericana del jefe de la diplomacia norteamericana es una oportunidad para colocar en la agenda de Estados Unidos el deterioro de la democracia en Honduras y Nicaragua.

Rubio, hijo de inmigrantes cubanos, y visto como un “militante anticomunista”, es el primer descendiente de latinos en ocupar la jefatura del Departamento de Estado. Su nombramiento por parte del presidente Trump y su confirmación por unanimidad en el Congreso fue interpretada como un mensaje de que la nueva administración de la Casa Blanca aplicará mano dura contra las dictaduras del continente, Venezuela, Cuba y Nicaragua.

Otro tema clave, dice Núñez, es la migración, especialmente ahora que el presidente Trump la ha declarado un tema de seguridad nacional y hay miles de centroamericanos en riesgo de afectación.

Para el también dirigente opositor en el exilio, Héctor Mairena, es "significativo" que la primera gira del secretario de Estado Marco Rubio sea hacia países de Centroamérica. "Muestra la relevancia que le está dando la administración del presidente Trump a la relación con nuestros países, a la situación en la región. El hecho que excluya a Honduras y a Nicaragua también me parece revelador por cuanto refleja el estado de las relaciones entre estos países y los Estados Unidos, particularmente en el caso de Nicaragua porque, como sabemos, los Estados Unidos han sido consistentes en su demanda para que en Nicaragua se respeten los derechos humanos y se dé una transición hacia la democracia", dijo Maireana.

Mairena dice que tanto los gobiernos de la región como los liderazgos opositores y la sociedad civil deben aprovechar el encuentro con Rubio para trasladar los problemas más sensibles que afronta la región en temas de democracia. Coincide en que tambien es importante agobar sobre la dramática situación que viven las comunidades centroamericanas en los Estados Unidos a propósito de las políticas migratorias de las deba administración.

Otro punto a tener presente es que la gira centroamericana del diplomático incluye a los cuatro países que se han opuesto a que el dictador de Nicaragua, Daniel Ortega, imponga a uno de sus operadores políticos en la Secretaría General del Sistema de Integración Centroamericana (SICA). 

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El vocero opositor en el exilio considera que la visita a estos países por parte de Rubio constituye una oportunidad para conformar “una política exterior en conjunto con Estados Unidos que permita mantenerse protegidos de las influencias rusa, iraní y China”.

Visita a Panamá en momentos de de tensión por el canal

La visita del Secretario de Estado a Panamá ocurrirá mientras se agitan las aguas del canal panameño luego que Trump, desde antes de ser juramentado, mencionara su intención de "retomar" el control estadounidense sobre el importante cruce interoceánico, lo que ha sido duramente rechazado por las autoridades panameñas.

El propio Rubio, durante su audiencia de confirmación en el Senado, sugirió que el uso que China hace de ese canal podría constituir una violación a los términos de la entrega del pase estratégico, ocurrida en 1999 en cumplimiento de los tratados Torrijos-Carter. 

La visita oficial de Rubio también se da en momentos de turbulencia política regional después de que Nicolás Maduro fuera investido, el 10 de enero, para un nuevo mandato en Venezuela a pesar de las denuncias de fraude electoral por parte de la oposición y de la comunidad internacional.

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Previo al inicio de su primera gira, Rubio habló con los líderes opositores venezolanos Edmundo González Urrutia, a quien Washington reconoce como “presidente electo”, y María Corina Machado a quienes les reafirmó su apoyo.

"Rubio reafirmó el apoyo de Estados Unidos a la restauración de la democracia en Venezuela y a la liberación incondicional e inmediata de todos los presos políticos, en línea con las aspiraciones democráticas pacíficas del pueblo venezolano", declaró su portavoz este jueves.