Fallece el expresidente salvadoreño Mauricio Funes, asilado en Nicaragua
Antes de morir Funes recibió el sacramento de la extremaunción a cargo del sacerdote Antonio Castro Granados. Falleció huyendo de la justicia de su país, protegido por Daniel Ortega quien, tras asilarlo, le otorgó la nacionalidad nicaragüense para blindarlo de una extradición
- enero 22, 2025
- 03:43 AM
- Despacho 505
- Copyright Despacho 505
El expresidente salvadoreño Mauricio Funes (2009-2014) falleció este martes a los 65 años de edad en Nicaragua, donde se encontraba asilado, "como resultado de su grave dolencia crónica" que no ha sido revelada. La noticia fue comunicada por el Ministerio de Salud, en una nota de prensa, horas después de que esa misma institucion lo reportara "delicado de salud".
"El Ministerio de Salud del Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional de la República de Nicaragua, por este medio, cumple con informar que, desafortunadamente, el paciente ciudadano Carlos Mauricio Funes Cartagena, expresidente de El Salvador, con residencia en nuestro país, ha fallecido esta noche, a las 21:35 horas, como resultado de su grave dolencia crónica", informó el régimen de Nicaragua en un comunicado.
A solicitud de sus familiares, el expresidente Funes fue asistido con el sacramento de la extremaunción, "consuelo que le llevó" el sacerdote Antonio Castro Granados, reportaron las autoridades de la dictadura.
Ortega y Murillo trasladan condolencias
A través de una nota oficial, Daniel Ortega y Rosario Murillo trasladó "sinceras condolencias, a sus hijos, a su compañera y a sus familiares, amigos y amigas y compañeros en Nicaragua y en El Salvador".
Funes llegó a Nicaragua en 2016 huyendo de la justicia de su país. El 30 de julio de 2019, recibió la nacionalidad en Nicaragua, un beneficio que lo blindó ante un inminente pedido de extradicion, ya que la Constitución nicaragüense, en su artículo 43, establece que los ciudadanos "no podrán ser objeto de extradición del territorio nacional".
La nacionalización de Funes fue oficializada en el Diario Oficial La Gaceta, donde también se validó el mismo beneficio para su esposa Ada Michell Guzmán Sigüenza, y sus hijos Carlos Mauricio Funes Velasco y Diego Roberto Funes Cañas.
El expresidente residía como asilado en Nicaragua desde septiembre de 2016 junto con su hijo Funes Cañas. Desde su llegada al país, ambos fueron beneficiados con contratos en el Ministerio de Relaciones Exteriores. En 2019, cuando salieron a luz los contratos de los Funes, él defendió el beneficio alegando que tenía suficientes méritos profesionales para prestar servicios de asesoría. "No veo por qué tanto escándalo", increpó el exmandatario a los cuestionamientos por los sueldos de 90.000 y 47,250 córobas que la Cancillería asignó para él y su hijo, respectivamente.
De acuerdo con la Fiscalía salvadoreña, Funes formó en la Presidencia una red con la que desvió fondos a ocho cuentas bancarias particulares y de las que se sacaron más de 292 millones de dólares.
Funes fue condenado en mayo pasado en El Salvador a 14 años de prisión por los delitos cometidos en el marco de una tregua entre las pandillas durante su Gobierno entre 2012 y 2014.
El expresidente fue juzgado en ausencia tras una reforma legal que lo permite y se convirtió así en el segundo presidente de la etapa democrática salvadoreña en recibir una condena de cárcel.
El aviso de gravedad
En la mañana del martes, en un primer comunicado, el Ministerio de Salud informó que Funes, que había sido atendido por distintas especialidades médicas desde que llegó a residir en Nicaragua, estaba padeciendo "una delicada situación de salud, agravada por dolencias crónicas que le han aquejado y que hemos también atendido".
"En comunicación con sus familiares hemos decidido publicar esta información, esperando que pueda el paciente Carlos Mauricio Funes Cartagena superar esta situación que desafortunadamente es de extrema gravedad", avisó.