Opositores celebran posición "clara y contundente" de Marco Rubio sobre Nicaragua

Opositores nicaragüenses celebraron las recientes declaraciones del senador Marco Rubio, próximo secretario de Estado de Estados Unidos, quien calificó a la dictadura de Daniel Ortega como una amenaza a la seguridad nacional debido al tráfico de migrantes y sus estrechas alianzas con potencias como Rusia, Irán y China.

El politólogo Félix Maradiaga describe a Rubio como "un amigo incansable de la democracia y un defensor consistente de los derechos humanos".

“El senador Rubio ha tenido una posición clara y contundente contra esta dictadura. Su liderazgo ha sido fundamental para abogar por sanciones específicas contra los responsables de las violaciones a los derechos humanos”, afirmó Maradiaga.

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El excarcelado político y exaspirante presidencial destacó que el tráfico ilícito, ya sea de personas, armas o drogas, se ha intensificado bajo el amparo del régimen, convirtiendo al país en una plataforma para redes del crimen organizado transnacional. “Ortega ha permitido que Nicaragua sea utilizada para operaciones que alimentan estas redes, agravando la crisis migratoria y poniendo en peligro tanto a las democracias vecinas como a la seguridad interna de Estados Unidos”, dice.

Por su parte, la investigadora y activista Martha Patricia Molina califica a Ortega y Murillo como "unos delincuentes que usan al país para promover que terceros estados criminales, como ellos, lleguen a confabular contra las naciones democráticas”.

La abogada criticó la pasividad de la diplomacia internacional frente al régimen nicaragüense. “Espero medidas que generen un impacto efectivo. Nicaragua es una dictadura que mata a su pueblo, no debería ser tratada con guantes de seda como hasta la fecha lo han hecho”.

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Los opositores llaman a la comunidad internacional a abordar la crisis nicaragüense de manera integral. Según Maradiaga, esto implica "apoyar a los demócratas dentro y fuera del país, aumentar la presión internacional sobre el régimen y trabajar en soluciones a largo plazo para restaurar el Estado de derecho en Nicaragua".