Al menos 546 nicaragüenses han sido despojados de su nacionalidad arbitrariamente

Al menos 546 nicaragüenses han sido despojado arbitrariamente de su nacionalidad y condenados a la apatridia desde febrero del 2023, de acuerdo a un recuento realizado por el organismo Raza e Igualdad (Race and Equality).

De los 546 desterrados, 161 nicaragüenses fueron expulsados en el 2024. En enero, 15 sacerdotes fueron enviados a Roma, entre ellos los obispos Rolando Álvarez e Isidoro Mora; en agosto, siete sacerdotes más fueron desterrados al Vaticano; 135 presos políticos fueron enviados a Guatemala en septiembre; y desde el 31 de octubre al 3 de diciembre fueron expulsados tres sacerdotes, entre ellos el obispo Carlos Enrique Herrera, y un periodista.

Raza e Igualdad destacó que el 2024 fue un año trágico para Nicaragua, ya que se consolidó el régimen autoritario de Daniel Ortega y Rosario Murillo, al reformar la Constitución Política para instaurar un sistema dinástico al concentrar el poder en la cuestionada figura de "co-presidencia".

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En ese periodo, el régimen aprobó al menos 12 leyes represivas destinadas a limitar "gravemente las libertades fundamentales, mientras la represión y el control estatal se intensifican".

Raza e Igualdad denunció que todavía permanecen en las celdas del régimen 45 presos políticos, entre ellos, 39 hombres, 6 mujeres, y 11 adultos mayores. Asimismo, denunciaron la desaparición forzada de 9 personas, entre ellas la periodista Fabiola Tercero, y los líderes indígenas Brooklyn Rivera y Steadman Fagoth.

"Actualmente, 45 personas permanecen privadas de libertad por razones políticas, incluyendo 39 hombres, 6 mujeres y 13 adultos mayores. Además, se reportan 9 casos de desaparición forzada, entre los que destacan la periodista Fabiola Tercero y los líderes indígenas Brooklyn Rivera y Steadman Fagoth", publicó la organización en su cuenta X.

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En relación a la represión institucional, Raza e Igualdad destacó la persecución que ejecuta el régimen Ortega-Murillo en las instituciones del Estado que "también ha alcanzado a trabajadores del Estado y simpatizantes del partido de gobierno, con al menos 25 casos de detención arbitraria que no han sido denunciados debido a amenazas".  

El organismo internacional advirtió sobre el deterioro de los derechos humanos en el país. La comunidad internacional sigue con preocupación los actos de destierro, desapariciones y detenciones arbitrarias en Nicaragua.