Exmandatarios condenan la reforma constitucional que afianza un modelo dictatorial en Nicaragua
Exlíderes de América y España instan a los gobiernos democráticos a no normalizar la dictadura Ortega-Murillo en Nicaragua que atenta contra los principios básicos de la democracia y los derechos humanos.
- diciembre 07, 2024
- 09:17 AM
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Los exjefes de Estado y Gobierno que conforman el Grupo IDEA denunciaron la reciente reforma a la Constitución Política de Nicaragua como una transición hacia "un modelo constitucional abiertamente dictatorial" que otroga un poder absoluto a Daniel Ortega y Rosario Murillo.
"Más que una reforma, Nicaragua adopta un modelo constitucional abiertamente dictatorial y de ejercicio compartido por la pareja Ortega-Murillo", rechazan en un comunicado los 27 exmandatrios que integran la iniciativa.
Los firmantes critican la supremacía del matrimonio Ortega-Murillo sobre todos los poderes del Estado, así como la subordinación de la Policía y la posibilidad de su militarización a discreción de la pareja dictatorial. Además, denuncian que la alteración a la Carta Magna, que ya fue aprobada en primera legislatura, "constitucionaliza la censura de la información con grave atentado para la libertad de expresión que es la columna vertebral de la democracia".
En Nicaragua desaparecen los principios de la democracia
Señalan que estas acciones violan principios esenciales de la democracia, como la separación de poderes y los derechos humanos. En el texto citan la la doctrina reiterada de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que resalta que "la separación de poderes guarda una estrecha relación, no solo con la consolidación del régimen democrático, sino además busca preservar las libertades y derechos humanos de los ciudadanos” y que, además, "limita el alcance del poder que ejerce cada órgano estatal" para evitar "su indebida injerencia". "Es esto, exactamente, lo que desaparece cabalmente en Nicaragua", lamentan.
Los firmantes entre los que se encuentran el costarricense Luis Guillermo Solís, los españoles Mariano Rajoy y José María Aznar; así como el mexicano Felipe Calderón, el ecuatoriano Guillermo Lasso, y el colombiano Iván Duque, consideran que Ortega y Murillo el asalto total del poder en Nicaragua representa “un grave retroceso histórico que tiene por víctima, desde ya, al conjunto de los nicaragüenses", advierten.
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Como ejemplo del declive democrático en Nicaragua y de los abusos que comenten en perjuicio de la ciudadanía, mencionan la orden de cierre de las congregaciones religiosas y el ultimátun que la dictadura dio a sus monjas para que abandonen Nicaragua antes del 1 de enero de 2025.
En ese sentido, el Grupo IDEA instó a los gobiernos democráticos a evitar que en el manejo de sus relaciones exteriores tno contribuya a normalizar el régimen de Ortega-Murillo, "que vulnera las bases de la civilización democrática".