"Te pudrís en la cárcel o salís", el ultimátum del régimen Ortega-Murillo a los músicos desterrados

"Tenes dos opciones, te pudrís en la cárcel o salís (del país)", fue la condena al destierro que un policía notificó a los artistas de Masaya Nieves Martínez, Dagoberto Fuentes Palacios y Juan Pablo Rosales. Llevaban casi 48 horas desaparecidos y lo que siguió fue la angustia de no saber en qué país terminarían, relata una fuente cercana.

Inicialmente, Martínez y Fuentes iban a ser enviados a Colombia, pero este país sudamericano no habría autorizado su viaje, indicó la fuente sin precisar detalles pues la información que han recibido -aclaró- ha sido muy limitada.

Finalmente los músicos fueron enviados a El Salvador. Se ha confirmado que Martínez y Fuentes permanecían en el país centroamericano sin ninguna certeza de si ese sería su destino final,  mientras que Juan Pablos Rosales, decidió tomar un vuelo a Estados Unidos porque contaba con visa de entrada a ese país.

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Los secuestros

La fuente, que se refiere a la Policía del régimen como "la Seguridad del Estado", a como le llamaban en los años ochenta al servicio de inteligencia de la primera dictadura sandinista, confirmó que los tres músicos fueron secuestrados bajo artimañas.

"La Seguridad del Estado los buscó y se los llevó al Chipote, donde les revisaron los celulares y ahí les dijeron que tenían dos opciones, podrirse en la cárcel o salir (del país)", manifestó.

En el caso de Martínez, los agentes de la dictadura se llevaron presos a un hermano y al suegro porque no lo encontraron en la casa, pero los soltaron cuando el artista se entregó.

Sobre la causa de los secuestros y posteriores destierros de los artistas, la fuente indicó que los dictadores Daniel Ortega y Rosario Murillo "andan viendo sombra por todos lados", porque no les hallaron nada que les diera motivo para encarcelar a los músicos y aún así los expatriaron.

Al primero que capturaron fue a Rosales, luego a Fuentes y por último a Martínez.

Otra razón por la que pudieron ser secuestrados, relató la fuente, es que alguien cercano al régimen haya mal informado a los tres artistas.

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Otras detenciones de artistas

La dictadura ya ha ejecutado otras redadas contra artistas del país. En abril de 2022 secuestraron al músico Josué Monroy de la banda Monroy & Surmenage y a Salvador Espinoza y Xóchitl Tapia, dueños de SaXo Producciones, así como a Leonardo Canales, director de La Antesala.

En noviembre de 2023, la Policía de la dictadura también detuvo a los artistas plásticos Frank Kevin Laguna, conocido como Vink Art, y Óscar Danilo Parrilla Blandón, solo porque estaban pintando un mural artístico en honor a la Miss Universo 2023, Sheynnis Palacios. Posteriormente, fueron desterrados y desnacionalizados.

Además, el régimen la ha emprendido contra otros artistas y escritores, los que han sido desterrados y hasta desnacionalizados, como los hermanos Luis Enrique y Carlos Mejía Godoy, el músico Jandir Rodríguez y los escritores Sergio Ramírez y Gioconda Belli.