Ortega y Murillo evitan felicitar a Trump: ¿Insensatez o estrategia?

Los dictadores nicaragüenses Daniel Ortega y Rosario Murillo emitieron un comunicado este miércoles, saludando al pueblo estadounidense por la jornada electoral del martes. Sin embargo, el mensaje evitó cualquier felicitación al expresidente Donald Trump, quien ganó la contienda.

Esta omisión ha generado opiniones divididas, ya que algunos interpretan la postura como una falta de prudencia diplomática, mientras otros sugieren que responde a un análisis del escenario geopolítico.

Los Ortega Murillo emularon de esa forma al ruso Vladimir Putin, quien tampoco felicitó a Trum y su portavoz, Dmitry Peskov, declaró que las relaciones entre Rusia y Estados Unidos estaban en el "punto más bajo de la historia".

Análisis de la Reacción Nicaragüense

Para los opositores de Ortega, esta actitud es arriesgada, ya que Nicaragua depende de Estados Unidos en términos comerciales y de remesas. La excarcelada política Dora María Téllez considera que los Ortega buscan medir la reacción de la nueva administración de Trump antes de expresar cualquier postura definitiva.

"Aquí estamos frente a un hecho de la naturaleza política de los Ortega, que deben estar pendientes de cuál es la reacción de la próxima administración en relación al régimen", expresó la excarcelada política Dora María Téllez.

Por otro lado, el analista Óscar René Vargas opina que el régimen está en una fase de espera, posiblemente en consulta con sus aliados internacionales como Rusia, Cuba, Venezuela e Irán, para evaluar la situación antes de dar un paso oficial hacia Trump. Según Vargas, este silencio refleja una estrategia cautelosa ante un escenario incierto.

"Están siendo prudentes para mientras encuentran alguna forma de acercarse a él guardando en lo posible las apariencias", opinó por su parte Moisés Hassan, mientras que el analista Óscar René Vargas indicó que los Ortega Murillo están en "espera para poder consultar con sus amigos (Rusia, Cuba, Venezuela, Irán) el balance y las perspectivas". "Necesitan asimilar los responsables y sus consecuencias", dijo Vargas.

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¿Insensatez o Precaución?

El excanciller nicaragüense Francisco Aguirre Sacasa señala que sería “sensato” que Ortega y Murillo hubieran enviado una felicitación a Trump, ya que la Casa Blanca suele contabilizar este tipo de gestos diplomáticos.

“Alguien en la Casa Blanca podría recordar este detalle en el futuro,” comentó Aguirre Sacasa, quien opina que la postura de Ortega refleja una oportunidad perdida para mejorar las relaciones con EE.UU. y evitar posibles tensiones diplomáticas.

Aguirre Sacasa sostiene que Trump valora mucho la percepción que otros países tienen de él, y que el desaire de Ortega y Murillo podría ser visto de forma negativa por el nuevo presidente.

También considera que este gesto “insensible” podría tener consecuencias para Nicaragua, un país con “poca relevancia geopolítica”, especialmente en comparación con naciones de peso como Rusia y los miembros de la OTAN.

 "Lo sensato hubiera sido enviarle a Trump una carta felicitándolo y de esa manera alguien en la Casa Blanca, que lleva la contabilidad de este tipo de cosas, diría más adelante que Nicaragua envió felicitación", analizó el excanciller Francisco Aguirre Sacasa, tomando en cuenta que las relaciones entre la dictadura nicaragüense y los Estados Unidos están "anormales" y pensando en los miles de nicaragüenses que están en Estados Unidos y envían remesas al país.

Aguirre Sacasa recordó que en términos prácticos, nada de lo que hagan los Ortega Murillo preocupa a los políticos estadounidenses, "no les paran bola" por ser Nicaragua "un país tan pequeño, tan pobre, tan enredado internamente" y existen  "docenas de otros países pequeños que sí han enviado saludo o no lo han hecho".

Por el momento, indica el excanciller y también desterrado por la dictadura, a los estadounidesense solo les interesa lo que está ocurriendo dentro de su país, porque hacía mucho tiempo que no se realizaban unas elecciones en las que se produjera "una victoria tan grande".

Los políticos estadounidenses sí estarían pendientes de las reacciones de países "con peso", como Rusia, los que conforman la OTAN o lod vecinos Canadá y Estados Unidos, pero no de Nicaragua.

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Por último, Aguirre Sacasa cree que la cancillería nicaragüense falló al no enviar una carta de felicitación a Trump y recordó que él, cuando fue canciller durante la administración de Arnoldo Alemán, no solo le envió una carta al en su momento nuevo presidente de México, Vicente Fox, sino que también posteriormente lo visitó en su residencia en Los Pinos y le obsequió una montura especial porque había averiguado que a Fox le gustaba montar a caballo.