Familia de Víctor Boitano teme que corra la misma suerte de Hugo Torres y Humberto Ortega
El coronel en retiro tiene seis meses secuestrado por la dictadura y, por ser italiano, sus familiares buscaron ayuda en la embajada de Italia, que se mostró temerosa por sus vínculos con el tenor Laureano Ortega Murillo.
- octubre 29, 2024
- 12:59 PM
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El coronel en retiro del ejército nicaragüense, Víctor Boitano, lleva más de seis meses secuestrado por la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo y la familia no sabe de él desde entonces, a pesar de que lo buscaron en el nuevo Chipote, en la cárcel Modelo y hasta en las oficinas principales de la Policía en Plaza El Sol.
La esposa de Boitano, Eugenia Salvadora de la Concepción Valle Olivares, de 61 años de edad, salió del país por punto ciego hacia Costa Rica, el pasado 11 de octubre, para denunciar el hecho y no ser encerrada también en una mazmorra de la dictadura.
Valle indicó a DESPACHO 505 que temen por la vida de su esposo porque ya tiene 63 años de edad y padece enfermedades crónicas como diabetes, hipertensión, mala circulación de la sangre y delirio de persecución diagnosticado por una psiquiatra del ejército, así como otros psiquiatras en Costa Rica, España e Italia.
"Si no se le trata, entra en crisis", advirtió Valle.
La preocupación por la vida de Boitano se acrecentó tras la muerte como prisionero político del general en retiro Humberto Ortega, hermano del dictador Ortega y por tanto cuñado de Murillo. En su momento, Ortega fue jefe de Boitano en el ejército.
"Con esta denuncia, pretendemos que se visibilice el caso. Ya le he pedido medidas cautelares a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), porque en las manos del régimen han muerto varios presos políticos, notables compañeros de él, como Hugo Torres y el general Ortega. ¿Qué puede uno esperar para una persona que no es cercana a ellos?", expresó la esposa de Boitano.
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Temor en la embajada de Italia
Boitano, fundador del ejército y coronel que se retiró en 2007 tras conflictos con el general Omar Halleslevens, fue encarcelado el pasado 23 de abril, después de realizar trámites para renovar el pasaporte nicaragüense. Lo llegaron a sacar de la casa y la familia lo buscó en todas las cárceles de Managua.
En el nuevo Chipote y en la cárcel Modelo de Tipitapa, a su esposa y su hija Rosana Boitano les dijeron que no estaba "en lista" y, en las oficinas principales de la Policía, en Plaza El Sol, donde ambas llegaron a buscar al jefe de la Policía, primer comisionado Francisco Díaz, les indicaron que este último "no tiene sus oficinas" ahí.
Por los medios de comunicación, Valle supo que su esposo estaría en la cárcel Modelo de Tipitapa, dentro de la celda llamada El Infiernillo, por lo inhóspito del lugar. A Valle eso le resulta irónico, porque ese centro penitenciario se llama Jorge Navarro y su esposo, Víctor Boitano, fue guerrillero sandinista en la lucha contra la dictadura somocista como segundo jefe de una columna que se llamaba precisamente Jorge Navarro y que operaba en los barrios orientales de Managua durante la insurrección final.
Debido a que el padre y el abuelo eran italianos, Víctor Boitano y su familia se nacionalizaron italianos. Boitano y sus dos hijos lo hicieron en 2017 y su esposa en 2019.
Por esa razón, finalmente Valle buscó apoyo para liberar a su esposo en la embajada de Italia en Managua. No lo hizo directamente, porque la dictadura la seguía y le intervino el teléfono, por lo que llamó a la embajda italiana desde otro teléfono.
"En la embajada italiana tenían temor de hacer algo para no romper relaciones con ellos (Ortega Murillo)", lamenta Valle, quien añade que los italianos tienen buenas relaciones con la dictadura a través de Laureano Ortega Murillo, hijo de los dictadores que es tenor y estudió música en Italia.
El temor que existe en la embajada italiana en Managua Valle lo confirmó cuando salió del país por veredas y llegó a Costa Rica, donde la embajada italiana en ese país sí le brindaron apoyo y, ahora que está en Italia, ya tiene una cita para plantear el caso de Boitano ante la cancillería italiana.
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La causa del secuestro
Oficialmente, Valle no sabe la causa del secuestro de su esposo a manos de la Policía del régimen Ortega Murillo. Lo poco que sabe fue por boca de algunos de los prisioneros políticos que han sido excarcelados, quienes le han contado que los interrogatorios que le hace la dictadura a Boitano se refieren a unos libros que el exmilitar escribió entre 2009 y 2010 y en los que critica al régimen Ortega Murillo y en uno aborda la muerte de Alexis Argüello cuando era alcalde de Managua.
Valle cree que el secuestro también tiene que ver con un hecho ocurrido en 2011, cuando Boitano se había metido a político de la mano de Enrique Quiñónez, en el ALN. Pero, Boitano organizó una conferencia de prensa para denunciar que Quiñónez estaba vendiendo el tendido electoral del partido a los Ortega Murillo.
Antes de la conferencia de prensa, Boitano fue detenido durante las festividades de Santo Domingo, en Managua, acusado de haber disparado y herido a un hombre que después dijo quedó paralítico, pero, según investigaciones de la familia de Valle, ya tenía problemas por haber sufrido poliomielitis en la niñez.
La detención habría sido para evitar que denunciara la venta del tendido electoral y salió libre a los tres meses después de que fue obligado a brindar otra conferencia de prensa, acusando a la OEA de injerencista y comprometiéndose a no participar más en política.
Valle dice que su esposo así lo hizo y hasta eliminó sus redes sociales. Se mantuvo apartado de todo, mientras construyó unos módulos en su casa, a través de un préstamo y rentarlos para la subsitencia de la familia.
En mayo de 2018 se fue a Italia y regresó en septiembre de 2023, para estar en Nicaragua cuando su hija se graduara en relaciones internacionales.
Pudo renovar la cédula de identidad y la licencia de conducir, pero, cuando quiso renovar el pasaporte, lo arrestaron el 23 de abril pasado.