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Dora María Téllez: "La muerte de Humberto Ortega es responsabilidad absoluta de los Ortega Murillo, una familia sin escrúpulos"

La exguerrillera sostiene que desde que el exgeneral de Ejército fue convertido en preso político y encerrado en el Hospital Militar, su hermano Daniel Ortega y Rosario Murillo "sabían que iba morir ahí, solo y aislado".

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Despacho 505
  • Managua, Nicaragua
  • septiembre 30, 2024
  • 12:51 PM

Humberto Ortega "murió solo y aislado". El fin de los días del número dos del primer gobierno sandinista en los años ochenta en Nicaragua -entronizado como el poderoso y temido general del Ejército Sandinista- lo determinó la saña sin límites de la dictadura que hoy lideran su hermano mayor Daniel Ortega y su cuñada y vieja rival, Rosario Murillo, sostiene la exguerrillera sandinista Dora María Téllez. 

Téllez, quien purgó prisión política hasta ser desterrada a Estados Unidos en febrero de 2023, apunta a Ortega y Murillo como "responsables" de la muerte del exgeneral porque sabían de la fragilidad de su salud. Lo sabían -alega- desde que dieron la orden el pasado mayo de asaltar su mansión en Managua y convertirla en su cárcel. "Humberto, un hombre de 77 años con patologías cardíacas y diabetes que fue sometido a casa por cárcel desde mayo, ¿Qué se podía esperar? Que se les muriera dentro del Hospital Militar, solo y aislado", cuestiona.

La histórica Comandante 2 de la Revolución Sandinista, apunta que si bien la muerte de Humberto Ortega tiene un peso significativo por tratarse de un Ortega, no es el primero al que la dictadura somete hasta la muerte. Trae al recuerdo a Hugo Tórres quien fue sacado grave de la cárcel de tortura El Chipote a morir en el hospital. El fallecimiento de Santos Flores Castillo, José Modesto Solís y Eddy Montes, este último asesinado dentro del Sistema Penitenciario Nacional, también pesan sobre la dictadura, menciona.

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Según Téllez, todos estos casos son evidencia de la crueldad de una dictadura que somete a sus adversarios  a condiciones que comprometen su vida. "Es el modelo de los Ortega Murillo. No les importa matar", subraya.

"La muerte de Humberto es responsabilidad absoluta de la familia Ortega Murillo que decidió mantenerlo preso en el Hospital Militar que convirtieron en cárcel", enfatiza.

Telléz, entre otras cosas señala la frialdad calculadora del régimen al hacer público en la víspera de una condición médica que sospechosamente detallaron prácticamente irreversible. Por eso, dice que su muerte no ha tomado por sopresa, explica, "desde el día de ayer (domingo 29 de septiembre) que salieron explicando que tenían preso a Humberto Ortega desde el 11 de junio y detallando largamente todos los males que tenía ya se sabía que o estaba muerto o se iba a morir en las próximas horas". 

Antes de ser internado en el hospital, el general en retiro, se mantenía bajo vigilancia en su residencia en Managua por cuestionar la sucesión "dictatorial" de su hermano mayor, quien no reparó en sus aportes como uno de los estrategas de la insurrección armada contra la dictadura de Anastasio Somoza Debayle en 1979, fundador del Ejército, al que dirigió desde 1979 a 1995, impulsando la profesionalización de la institución armada.

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