Brasil expulsa a la embajadora de Nicaragua

La decisión fue anunciada después de que el régimen de Daniel Ortega ordenara que el embajador brasileño abandone Nicaragua este jueves

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Despacho 505
  • agosto 08, 2024
  • 11:20 AM

El Gobierno de Brasil expulsó este jueves a la embajadora de Nicaragua, Fulvia Castro. La decisión fue tomada en "reciprocidad" a una medida similar adoptada por régimen de Daniel Ortega con el representante brasileño en Managua, Breno de Souza da Costa, informó la agencia de noticias EFE citando fuentes oficiales.

La orden de salida  de Nicaragua del embajador brasileño se conoció este miércoles, pero hasta el momento ninguno de los dos países emiten notas oficiales. Según el diario Folha, desde hace dos semanas Brasil hizo gestiones con Nicaragua para aclarar la medida y aguardó un pronunciamiento definitivo que llegó este jueves. Lejos de echar pie atrás, Ortega ordenó la salida inmediata del país del diplomático brasileño.

Lo que se conoce es que el régimen decidió expulsar al jefe jefe de la misión diplomática de Brasil en Managua porque este no asistió, el pasado 19 de julio, al acto conmemorativo del 45 aniversario de la revolución sandinista. A eso se suma el enfriamiento de las relaciones con el presidente del país suramericano, Luiz Inácio Lula Da Silva, quien en varias ocasiones se manifestó en desacuerdo con el rumbo dictatorial de Ortega.

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Según las fuentes consultadas por EFE, Brasil no ha hecho más que aplicar el "principio de la reciprocidad" frente a una medida que ha considerado "injustificada".

El presidente de Brasil ha tenido en el pasado una estrecha relación con Ortega desde 1980, cuando el líder brasileño viajó a Managua para el primer aniversario de la revolución sandinista, una ocasión en la que además conoció personalmente al entonces presidente cubano, Fidel Castro.

En los últimos meses, sin embargo, la relación se ha deteriorado, sobre todo debido a la "persecución política" que el régimen de Managua mantiene sobre antiguos sandinistas y religiosos.

El propio Lula explicó la situación el mes pasado, en una rueda de prensa con corresponsales extranjeros en Brasilia, en la cual reveló que Ortega no le atiende el teléfono desde que el papa Francisco le pidió que abogue por la situación de un obispo detenido en Nicaragua.

"Conversé con el papa y él me pidió que conversara con Ortega sobre un obispo que estaba preso", dijo Lula en referencia al religioso Rolando Álvarez, encarcelado por su oposición al Gobierno nicaragüense.

"Lo concreto es que Ortega no me atendió el teléfono y no quiso hablar conmigo. Entonces, nunca más hablé con él", agregó.

Lula lamentó que eso ocurra con "un tipo que hizo una revolución como la que Ortega hizo para derrotar a (Anastasio) Somoza" y dijo que hoy no sabe "si esa revolución fue porque quería el poder o porque quería mejorar la vida de su pueblo".

El presidente brasileño se dijo favorable a que en todo país "haya una alternancia en el poder", porque es "lo más sano" para una democracia.

Según Lula, "cuando un dirigente se pone en la cabeza que él es imprescindible o insustituible, ahí es que comienza a nacer el espíritu del dictador".

La expulsiones de embajadores ocurren en momentos en que Lula, junto con los presidentes de Colombia, Gustavo Petro, y México, Manuel Andrés López Obrador, intentan una negociación para buscar una salida a la grave crisis abierta en Venezuela tras las elecciones del pasado 28 de julio.

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Nicaragua es uno de los pocos países de América Latina que ha reconocido a Nicolás Maduro como presidente electo, pese a que las autoridades electorales de Venezuela aún no han presentado las actas de un proceso que la oposición ha denunciado como fraudulento.

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