Daniel Ortega apuesta por los Brics para frenar las sanciones de Estados Unidos

El dictador Daniel Ortega aseguró anoche, durante la entrega de 250 unidades de buses chinos, que los "BRICS" representan un freno para "las políticas de sanciones" que aplica Estados Unidos, a regímenes autoritarios y violadores de derechos humanos en el mundo.

En un discurso cargado de elogios hacia la República Popular de China y su presidente Xi Jinping, Ortega puso sus esperanzas en las relaciones bilaterales entre ambos países para hacerle frente al impacto de las sanciones en Nicaragua.

"En los BRICS forman un grupo muy importante que es un freno para las políticas imperialistas, las políticas de invasión, las políticas de sanciones. Es un freno", dijo el dictador sandinista.

El dictador sandinista recordó que en la década de los 80 estableció las relaciones diplomática con China, pero después de su derrota electoral, el gobierno de doña Violeta Barrios de Chamorro rompió las relaciones con China.

"Bueno, en el 90 entraron los neoliberales impuestos por los gringos, y lo primero que hicieron fueron romper las relaciones con la República Popular China", dijo Ortega.

SIEMPRE PENSÓ EN CHINA

Asimismo, reconoció que durante los 17 años de gobiernos democráticos en Nicaragua, se dedicó a boicotearlos con la ayuda de transportistas, y la Unión Nacional de Estudiantes de Nicaragua (UNEN), con los que realizaba asonadas y huelgas con los sindicatos sandinistas, en su estrategia de "gobernar desde abajo" para crear caos y desestabilización.

"Tuvimos paciencia para dar la batalla gobernando desde abajo, durante tres gobiernos neoliberales. Pasaron tres Gobiernos Neoliberales, y dimos la batalla desde abajo. Y la dimos con los Transportistas, en las calles dimos la batalla, y con los trabajadores defendiendo las empresas, y con los campesinos defendiendo la tierra, y con la defensa del 6% para las Universidades, la educación gratuita, porque todo lo estaban privatizando",admitió Ortega.

El dictador nicaragüense dijo que desde que ganó las elecciones presidenciales en el 2007 buscó la manera y el momento para restablecer las relaciones diplomáticas con China; sin embargo, esperó 15 años para romper con Taiwán, gobierno que financió la mayoría de sus proyectos relacionados con el agro y el Bono Productivo Alimentario. Incluso, financiaron la construcción del nuevo estadio de béisbol.

"Regresamos al gobierno y siempre en comunicación con la República Popular China, y buscando el momento en que podríamos ya normalizar nuevamente las relaciones. Hemos estado unidos en las luchas, en las batallas que ha venido librando el pueblo chino para mejorar sus condiciones", apuntó Ortega.

Durante su discurso, se dirigió a su hijo, Laureano Ortega Murillo, como el representante especial de Nicaragua con el gobierno de China.