Homilía de monseñor Rolando Álvarez
En el texto evangélico, nos detenemos en Jesús, María y José.
- diciembre 18, 2024
- 02:15 PM
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- Jesús es el Hijo del Dios Altísimo, el Dios con nosotros. El Papa Francisco en la Carta a los fieles de Nicaragua, exhorta: “No se olviden de la Providencia amorosa del Señor, que nos acompaña y es la única guía segura. Precisamente en los momentos más difíciles, donde humanamente se vuelve imposible poder entender lo que Dios quiere de nosotros, estamos llamados a no dudar de su cuidado y misericordia” (02 Diciembre 2024).
- María, la Madre de Jesús, la llena de Gracia, la Inmaculada, la Mujer Expectante por el nacimiento de su Hijo. Continúa el Santo Padre: “Tengan la certeza de que la fe y la esperanza realizan milagros. Miremos a la Virgen Inmaculada, ella es el testimonio luminoso de esta confianza. Ustedes siempre han experimentado su amparo materno en todas sus necesidades y han mostrado su agradecimiento con una religiosidad muy hermosa y rica espiritualmente”. (Ibid).
- José, el varón justo. La justicia que nos trae el Dios que nace y que esperamos con alegría. “En cada circunstancia de su vida, José supo pronunciar su “Fiat”, como María en la Anunciación y Jesús en Getsemaní…el Evangelio nos dice que Dios siempre logra salvar lo que es importante, con la condición de que tengamos la misma valentía creativa del carpintero de Nazaret, que sabía transformar un problema en una oportunidad, anteponiendo siempre la confianza en la Providencia” (cf. Patris Corde del Papa Francisco, 3.5).
Que María, Nuestra Señora de la Expectación, nos mantenga expectantes ante la venida de su Hijo. Amén.
Monseñor Rolando Álvarez.