El femicida de Sapoá, Rivas, admite crimen ante juez

El femicida José Rafael Reyes Amador, de 21años, admitió ante un juez  que el pasado 13 de febrero de 2022 asesinó a  acuchilladas a su pareja Ana Rosa Amador Hernández, de la misma edad, cuando se encontraban solos  en la casa en la que ellos convivían, frente a las costas del Lago Cocibolca, en la comunidad de Sapoá del municipio de Cárdenas, departamento de Rivas.

La admisión de hechos  la  hizo  ayer ante el juez  del Juzgado de Distrito Penal de Violencia de Rivas, Sandro Pereira, quien había convocado a las partes para dar inicio al juicio oral y público. Al llegar a la sala  judicial, el acusado mostró su interés por  admitir los hechos y renunciar al juicio,  tras explicar que no estaba siendo presionado ni amenazado por nadie y que había decidido confesar el crimen por voluntad propia.

Cuando el  juez  le preguntó: "¿Está claro que al admitir hechos,  renuncia al juicio oral y público y va a  ser condenado?",  Reyes Amador  le respondió que  "reconozco los hechos y no he sido amenazado, es voluntario por el arrepentimiento y remordimiento que tengo".

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VÍCTIMA ERA SU PRIMA

Tras la  admisión de hechos, la  Fiscalía solicitó imponer al femicida  una condena  de  30 años de cárcel y la abogada defensora, Adela Muñoz, solicitó 20, pero la sentencia que finalmente impondrá el  judicial se dará  a conocer el próximo 30 de marzo.

El hecho que conmocionó a los rivenses, ocurrió aproximadamente a las 5:30 de la mañana del domingo 13 de febrero dentro de  la casa en la cual la pareja convivía desde hace aproximadamente hace ocho años  y  que pertenece al papá de  la víctima.

Tres días antes del femicidio,  Reyes Amador,  había amenazado con matar a su pareja, quien también  era su prima  y hasta le advirtió que  después de privarle la vida, le enviaría la cabeza a su mamá en una caja,  según declaraciones de los familiares. 

“Por esa amenaza  ella lo dejó y se vino a vivir  con la hija de  cuatro años que ellos procrearon  a la casa de mi mamá ubicada   en el  asentamiento Donald Ibarra de Sapoá, pero a las 5:00 de la mañana de ese  fatídico domingo,  mi hermana  se fue a traer  su ropa a la casa, donde ellos vivían , pero Reyes Amador la interceptó y al llegar a la propiedad la mató", explicó Estefanía Carrillo Hernández de 24 años.

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CON ENGAÑOS

Según la Fiscalía, el  femicida  actuó con alevosía y   aprovechó  que  la víctima se encontraba en desventaja, por encontrarse en un lugar despoblado en el que no podía pedir ayuda. 

La parte acusadora detalla  que antes de privarle  la vida,  la convenció  de  tener relaciones sexuales y luego procedió a propinarle una  estocada en el abdomen y una en  el cuello.    El médico forense dictaminó que la causa de muerte de la joven fue un shock hipovolémico, que sufrió producto de las heridas.