Decretan arresto domiciliar “con vigilancia policial” a los presos políticos Edgard Parrales y Mauricio Díaz
Familiares de presos políticos aseguran que en las cárceles de la dictadura hay más de 30 reos de la tercera edad que deben ser enviados a casa.
- febrero 24, 2022
- 09:42 PM
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El régimen de Daniel Ortega ordenó al Poder Judicial decretar arresto domiciliar a los exdiplomáticos Edgard Parrales y Mauricio Díaz, dos de los presos políticos de mayor edad que hasta este jueves estaban en las cárceles de El Nuevo Chipote.
El Ministerio Púbico solicitó ante la autoridad judicial el cambio de medida cautelar por “razones humanitarias”.
“El Ministerio Público, ante el estado de salud de las personas referidas, por razones humanitarias, pidió a la autoridad judicial el cambio de medida cautelar de prisión preventiva por detención domiciliaria, lo que fue concedido por la correspondiente autoridad judicial”, indicó la Fiscalía en un comunicado.
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El exdiplomático y analista político Edgard Francisco Parrales Castillo, 79 años, es el preso político de mayor edad encarcelado por la dictadura desde el 22 de noviembre, cuando un grupo de civiles lo secuestraron en la puerta de su casa, después de haber participado en un programa televisivo de opinión.
RECLUIDOS EN EL NUEVO CHIPOTE
Parrales fue conducido a las celdas de la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ) conocidas como El Nuevo Chipote donde estuvo sometido a tratos crueles, inhumanos y degradantes pese a su avanzada edad y su grave estado de salud, según han denunciado organismos de derechos humanos.
El preso político es procesado por el supuesto delito de "conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional" y "propagación de noticias falsas" en perjuicio del Estado de Nicaragua y la sociedad nicaragüense. Está a la espera de juicio.
En tanto, el también exdiplomático y dirigente de la organización política opositora Ciudadanos por la Libertad (CxL), Mauricio José Díaz Dávila, de 71 años, fue detenido el 9 de agosto luego de comparecer a una cita ante la Fiscalía para una supuesta entrevista, pero que en realidad era una maniobra para secuestrarlo.
Díaz fue enjuiciado y declarado culpable el 16 de febrero por el juez orteguista Luden Martín Quiroz García, del Juzgado Noveno Distrito Penal de Juicio, por el supuesto delito de conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional en perjuicio del Estado de Nicaragua y la sociedad nicaragüense. La Fiscalía solicitó 9 años de cárcel contra el opositor.
PRESOS PERO EN SUS CASAS
El régimen Ortega-Murillo ya había ordenado arresto domiciliario para los reos de conciencia Francisco Aguirre Sacasa, Arturo Cruz y José Pallais. La medida fue ordenada luego del fallecimiento, siendo preso político, del general en retiro y dirigente opositor Hugo Torres.
Los cinco presos políticos permanecen bajo una fuerte vigilancia policial que no permiten el contacto con el resto de familiares ni tienen acceso a dispositivos móviles.
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De acuerdo con organizaciones de familiares de presos políticos y organismos de derechos humanos, en las cárceles de la dictadura hay más de 30 reos de conciencia de la tercera edad que padecen enfermedades crónicas.
No obstante, la dictadura de Ortega se ha mostrado indolente y los sigue manteniendo en régimen carcelario, sin alimentación y atención médica adecuada.