El zanatillo, ave endémica de Nicaragua, vuela hacia la extinción
El zanatillo es un ave nicaragüense poco valorada. Un estudio reciente encontró que, debido al deterioro de su hábitat, ha comenzado a alzar vuelo hacia Costa Rica.
- enero 03, 2022
- 09:21 AM
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El zanatillo nicaragüense ha ingresado a la Lista Roja de especies en riesgo. Está clasificada como una especie con población en decrecimiento. Es decir, cada vez hay menos registros de zanatillos. El inicio del vuelo hacia la extinción del zanatillo no genera alarmas, pues en Nicaragua es un ave a la que no se le reconoce su alto valor.
El zantatillo, Quiscalus nicaraguensis, es confundida con el zanate común, Quiscalus mexicanus, ave que abunda en las ciudades y pueblos de Nicaragua. Sin embargo, el zanatillo solo vive cerca de los lagos Xolotlán (lago de Managua) y Cocibolca (lago de Nicaragua) y los humedales cercanos, como Tisma.
El zanate y el zanatillo son muy parecidos. A ojos inexpertos es casi imposible distinguirlos. Sus diferencias son el color de las plumas: en el zanate macho son de color negro con iridiscencia de un tono azul, mientras que en el zanatillo macho, las plumas son negro, sin tonos.
Otra diferencia es el tamaño. El zanatillo es mucho más pequeño que el zanate común, y tiene una cola pequeña. En las hembras de ambas especies la variante solo es de tamaño.
No obstante, la diferencia más marcada entre ambas aves es el canto. Si conoces el canto de un zanate común y el de un zanatillo, sabrás quien es quien.
UN AVE NICA
Los hábitos son distintos también. El zanate -se sabe- se alimenta de sobras que los humanos dejamos, por eso es que se quedaron en las ciudades y pueblos. No obstante, los expertos describen que el zanatillo prefiere vivir en zonas inundadas y con matorrales, alejado de los asentamientos humanos.
El zanatillo nicaragüense es endémico, lo que quiere decir que solo se conoce que vive en Nicaragua y en una pequeña zona al norte de Costa Rica. Esto la convierte en un ave endémica binacional. No obstante, los investigadores de aves de Nicaragua, resaltan que el principal hábitat de esta ave se encuentra en Nicaragua.
El endemismo del zanatillo hace que sea una especie muy vulnerable, ya que, si llega a desaparecer de Nicaragua, desaparecería del mundo. Es por eso que todas las especies endémicas de animales son especiales. En pocas palabras, el zanatillo nicaraguense está en la misma circunstancia que el oso polar, quien, si llegase a desaparecer del Ártico, estaría extinto.
¿A DONDE SE HAN IDO EL ZANATILLO?
Cindy Orozco es una joven bióloga que para su tesis de graduación en la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN) realizó una investigación sobre el efecto del cambio climático en la población de zanatillos nicaragüenses.
Las investigaciones científicas sobre el zanatillo son nulas, a pesar de la importancia ecológica de esta ave.
En su trabajo, Orozco encontró que el ecosistema donde vive el zanatillo depende de la recarga de agua. Además, identifico que la sequía, las quemas agrícolas y el cambio del uso de la tierra ejercen una gran presión sobre el limitado hogar de estas aves.
Ha encontrado que disminuyen los lugares de anidación y alimento. “Una de las hipótesis es que están migrando hacia el norte de Costa Rica”, afirmó.
Marvin Torrez es biólogo y ha investigado las aves de Nicaragua por muchos años. Explicó que el norte de Costa Rica es parte del ecosistema de humedal que forma la cuenca del Gran Lago de Nicaragua.
El zanatillo se adaptó para vivir dentro de este ecosistema de humedal, señaló Torrez. El espejo de agua, el sistema lagunar de Tisma y las zonas inundables al norte de Costa Rica, son parte del ecosistema de humedal donde habita el zanatillo.
El zanatillo prefiere vivir cerca de los humedales porque se alimenta de invertebrados que extraen del lodo, sin embargo, también come semillas e insectos, expresó Torrez.
La ecologa e investigadora de las aves Salvadora Morales, visitó en 2016 la laguna de Tisma, un espejo de agua ubicado entre los lagos Xolotlán y Cocibolca y se encontró con el humedal seco.
La población de zanatillos que monitoreaba Morales desapareció. Años después, cuando la laguna de Tisma recuperó su espejo de agua, la población volvió, pero ya no era tan grande como antes.
POBLACIÓN DECRECE
Orozco afirmó que las alteraciones del ecosistema obligan al zanatillo a desplazarse.
“De marzo a junio de 2020 buscamos poblaciones de zanatillos en Tisma, Tipitapa, Mateare y Rivas. No encontramos colonias donde antes había”, aseguró.
La Lista Roja de especies de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) es la lista más grande de animales que están en peligro de extinción o tienen alguna calificación en su preservación.
El zanatillo nicaragüense está dentro de esta lista y está calificada como una especie en “preocupación menor”, pero con población en decrecimiento. Es decir, cada vez hay menos registros de zanatillos.
El principal desafío es conocer la cantidad de zanatillos que hay. La falta de datos limita a los investigadores para poder hacer comparaciones en las poblaciones de estas aves. “No podemos saber si el ave está peor que antes”, enfatizó Orozco.