Medardo Mairena y Félix Maradiaga pierden 50 libras de peso en las celdas de la dictadura

La cárcel ha golpeado físicamente a los presos políticos, aunque su espíritu se mantiene inquebrantable, dicen familiares que los han visitado al comenzar los primeros días del año.        

Un medio radial a fin al régimen difundió las primeras imágenes de los familiares en sala de espera en las oficinas de Auxilio Judicial, este sábado, mientras se anunció que otros estaban programados para recibir visitas este domingo.

La defensora de derechos humanos Berta Valle publicó en Twitter que familiares lograron ver a su esposo Félix Maradiaga y notaron una visible pérdida de peso. “Félix ha perdido 50 libras, por lo que está delgado. Pero está orando y Dios sosteniéndole”, aseguró.

Valle denunció en sus tuits que las condiciones contra los presos políticos no han cambiado y les siguen negando el ingreso de la biblia. “Aún no les permiten sábanas para cubrirse, su celda sigue en penumbra, recibe sol cada ocho días por 10 minutos, los interrogatorios siguen", escribió Valle, quien reiteró que del preso político no sabían nada desde hacía 45 días.

LÍDERES CAMPESINOS TAMBIÉN CON MENOS PESO

El número de opositores encarcelados en Nicaragua, calificados por organismos humanitarios como “presos políticos”, se elevó a 170 en diciembre, informó el último día del año el Mecanismo para el Reconocimiento de Personas Presas Políticas, cuyos datos son avalados por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, CIDH.

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El Movimiento Campesino de Nicaragua por su lado, denunció en su cuenta también de Twitter, que Medardo Mairena, líder de esta agrupación -también preso político-, ha perdido 53 libras en los seis meses que lleva detenido.  Mairena y la mayoría de los secuestrados políticos se encuentran en las celdas de el nuevo Chipote, ubicado en Managua.

“Hoy a casi 6 meses del secuestro de nuestros hermanos y líderes campesinos, Medardo Mairena, Freddy Navas y Pedro Mena, sus familiares pudieron verlos. Siguen perdiendo peso. Continúan los interrogatorios como forma de tortura y siguen desconectados de lo que acontece afuera”, dijo la organización.

El movimiento denunció también que los campesinos no tienen acceso a ningún tipo de noticias. “En este tiempo han padecido diferentes malestares de salud fuera de lo normal. Agradecen siempre a todas esas personas que siguen pendiente de ellos y de todos los presos políticos”, agregaron en la publicación.

FIRMES EN LO QUE CREEN

Hasta noviembre último, las organizaciones de derechos humanos, establecían la cantidad de “presos políticos” en 168, sin embargo, otros tres opositores fueron capturados y uno excarcelado, para llegar a 170 hasta el 30 de diciembre, informó el Mecanismo.

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La organización explicó que, del total de opositores presos, 160 han sido capturados en el marco del estallido social contra los dictadores Daniel Ortega y Rosario Murillo en abril de 2018, y diez, ya estaban presos desde antes de ese año, señaló el informe. Los 170 “presos políticos” es la cantidad más alta de opositores encarcelados en los últimos 12 meses, ya que en enero pasado el total era de 121, de acuerdo con las estadísticas.

Según los familiares que han podido ver a sus parientes, los presos por pensar diferente al régimen, no han cedido en sus convicciones y se encuentran firmes. “Está de buen ánimo y fuerte espiritualmente. Agradece todos los mensajes de cariño en estas fechas. Su convicción y compromiso con Nicaragua están intactos”, dijo Valle sobre el estado emocional de Maradiaga.

Lo mismo expresó el Movimiento Campesino de sus líderes. “Se mantienen firmes en sus convicciones de libertad”, dijeron.

Con la visita de estos días, sumaría una cuarto encuentro entre los presos y sus familiares en más de 200 días de haber sido secuestrados y encarcelados bajo cargos inventados. Durante la visita de este domingo, el restos de familiares verificarán su estado de salud, principalmente el de Ana Margarita Vigil cuyos familiares, denunciaron agresión de parte de un oficial de “alto rango” que llegó a su celda en estado de ebriedad.