UE llama a volver al diálogo y advierte estar atenta para “reaccionar” ante un mayor deterioro de los derechos humanos
“La comunidad internacional puede ayudar, pero no nos cabe resolver los problemas de Nicaragua... la responsabilidad final y total está con ustedes”, expresó Kenny Bell en su despedida como representante de la Unión Europea en Nicaragua.
- agosto 24, 2019
- 06:05 AM
- Despacho 505
- Copyright Despacho 505
“La comunidad internacional puede ayudar, pero no nos cabe resolver los problemas de Nicaragua... la responsabilidad final y total está con ustedes”, expresó Kenny Bell en su despedida como representante de la Unión Europea en Nicaragua.
El embajador de la Unión Europea en Nicaragua (UE), Kenny Bell llamó a retomar el diálogo como “una condición esencial para resolver la situación (de crisis) política”, recomendó no esperar que las soluciones vengan de fuera, al tiempo que reiteró la disposición de la Unión Europea a colaborar para una salida negociada o bien a reaccionar ante un mayor deterioro de la situación.
“La comunidad internacional puede ayudar, pero no nos cabe resolver los problemas de Nicaragua. El derecho, el privilegio y la responsabilidad final y total están con ustedes. Y tengo confianza que encontrarán el camino”, manifestó Bell en su mensaje de despedida como representante de la UE.
No obstante, consignó: “El Consejo (de la UE) subraya su disposición a utilizar todos sus instrumentos políticos para contribuir a una salida negociada pacífica de la crisis actual y reaccionar ante un mayor deterioro de los derechos humanos y el Estado de derecho”.
Las altas autoridades europeas han dirigido enérgicas condenas a la administración de Daniel Ortega por el uso excesivo de la fuerza y las graves violaciones de derechos humanos registradas en el contexto de las protestas, instándolo a negociar una salida pacífica que garantice restitución de libertades, democracia, justicia y reparación; y advirtiendo sobre futuras sanciones a funcionarios con responsabilidad demostrada en las acciones represivas e incluso la posibilidad de suspender el Acuerdo de Asociación vigente.
LEA MÁS: Unión Europea insiste a Ortega justicia y democracia
Antes de profundizar en el tema de la crisis, el diplomático inició su mensaje despedida manifestando la voluntad de los países europeos de mantener la cooperación con Nicaragua. “Me limito a asegurarles hoy que esta cooperación continua... Y nuestra cooperación continúa encarando las necesidades del pueblo nicaragüense, sobre todo los más vulnerables. Por ejemplo, en educación, agua y saneamiento, seguridad alimentaria, temas productivos”, dijo incluyendo entre los sujetos de apoyo a la sociedad civil y víctimas de violencia.
RETO A LA UNIDAD
Bell, quien dirigió la misión diplomática de la UE durante cuatro años en Nicaragua, apeló a la franqueza “entre amigos y socios” para abordar la grave situación que afronta el país.
“Quisiera hablar de diálogo, que seguimos viendo como una condición esencial para resolver la situación política”, enfatizó.
La liberación de presos, los acuerdos de garantías y libertades, la reforma electoral y el acceso a la justicia, temas acordados a abordar en la mesa de negociación entre la Alianza Cívica y los delegados de Daniel Ortega, el embajador los calificó como áreas claves para renovar la institucionalidad del país. “Creo que urge que se vuelva a la mesa para hablar de estos temas”, reiteró.
LEA MÁS: Faltan sanciones Europeas para frenar a Ortega, advierte Human Rights
Así lanzó un retó a la unidad: “Reto pues a todos a juntarse para abordar estos temas críticos para el futuro, llegar a establecer prioridades comunes para el país; allí está el desafío que debe plantearse hoy”, señaló.
EL ESPEJO DE LA HISTORIA
El mensaje del diplomático europeo también repasa la tragedia británica de Peterloo, cuando manifestantes que demandaban cambios políticos en Manchester fueron atacados por una compañía de caballería.
“No se sabe cuántos murieron: mujeres y niños incluidos, se estima entre 11 y 22. Esto pasó hace exactamente 200 años. Fíjense como hasta hoy este incidente, tan lejano que parece, conlleva a una gran memoria, mucho análisis, amplia conmemoración.
No es para buscar paralelos, sino para tirar una lección, y llevarnos a la reflexión que debemos todos levantar la cabeza y pensar en el futuro: qué mundo queremos, qué Europa queremos, qué Nicaragua queremos. Porque la gente, la historia, el futuro, recordará”, reflexionó Kenny Bell.
De esta manera Bell llamó a pensar en el mañana: “en los jóvenes, las víctimas de violencia, los exiliados, los que no han podido seguir su educación; el porvenir del país. Nicaragua necesita todo este talento, toda esta juventud, toda esta experiencia, conocimiento, habilidades, potencial, para poder crecer y avanzar como país”, destacó.
LEA MÁS: Parlamento Europeo acelera sanciones contra Ortega y sus funcionarios
Los efectos más graves de la crisis que inició el 18 de abril de 2018, según organismos internacionales son: entre 328 y 500 muertes, 80,000 exiliados, libertades fundamentales reprimidas, más de 700 presos políticos de los cuales 130 continúan en prisión; medios de comunicación confiscados y persecución y criminalización de opositores, defensores de derechos humanos y periodistas.
El embajador Kenny Bell dirigió su mensaje en un cóctel de despedida al que asistieron funcionarios del régimen, el nuncio Waldemar Sommertag, miembros del cuerpo diplomático y de la delegación de la Unión Europea, representantes de organizaciones internacionales, miembros de la prensa, de sociedad civil, del sector privado y productivo.