Una llamada de Rosario Murillo bastó para cancelar graduación de la UAM

El director del Teatro Nacional Rubén Darío alegó problemas técnicos que le impedían cumplir con el contrato de alquiler de la Sala Mayor, para la ceremonia de graduación por la que cada estudiante había pagado US$600.

Una llamada a Ramón Rodríguez, director del Teatro Nacional Rubén Darío, desde El Carmen bastó para que se cancelará el acto de graduación que la Universidad Americana (UAM), propiedad del Ejército de Nicaragua, tenía previsto realizar la tarde de este sábado.

Hasta los oídos de Rosario Murillo, abuela de Ariana Ortega, hija de Rafael ‘Payo’ Ortega, se filtró que el estudiantado había organizado un complot contra la nieta de la pareja dictatorial, quien también se graduaría; así como un homenaje para la estudiante brasileña Reyneia Da Costa Lima, asesinada a manos de un paramilitar, el pasado 23 de julio del 2018, provocando la furia de Murillo, quien optó por cancelar el evento.

En la graduación tenían previsto realizar un minuto de silencio para recordar a Raynéia, expresar su descontento por la liberación de su asesino, además de dedicarle la actividad. Inconformes con la situación del país los estudiantes también habrían convocado a un plantón a las 2 de la tarde.

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«Ella llamó directamente al Teatro para que se cancelara la actividad, porque se dio cuenta que se haría ese complot», expresó una autoridad de la UAM que solicitó el anonimato.

PAGARON U$600 POR GRADUANDO

La indignación de los familiares de los 194 estudiantes que se estarían graduando no se hizo esperar. En redes sociales mostraron su descontento no solo por lo que significa cancelar la actividad, sino porque también habrían pagado 600 dólares para presentarse en el Teatro Nacional Rubén Darío.

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“Es indignante lo que ha hecho esta mujer (Rosario Murillo). Esa mujer lo sabe todo, parece que controla la vida de todos en este país”, dijo la misma fuente.

Martín Guevara, rector de la UAM, habría sido quien informó a los estudiantes y las autoridades sobre la cancelación del evento. Asimismo, se comprometió a reembolsar el dinero vía transferencias bancarias, entre lunes y martes de la siguiente semana.

El acto de graduación se improvisó en uno de los auditorios de la Universidad Americana, después de una acalorada discusión entre padres de familias y estudiantes con el rector Martín Guevara.