Arturo Cruz asegura que CxL es el canal “más relevante” que puede lograr la unidad de la oposición

El precandidato a la Presidencia de Nicaragua, Arturo Cruz, se ha defendido hoy de quienes lo acusan de prestarse al juego de Daniel Ortega para las elecciones generales de noviembre próximo. “Yo no estoy jugando el juego de nadie, soy un candidato opositor real”, dijo en una improvisada conferencia de prensa al término de una reunión que sostuvo con la Alianza Ciudadana, en la sede del partido Ciudadanos por la Libertad (CxL).

Cruz, exembajador de Nicaragua en Estados Unidos y docente del Incae, respondió a las preguntas de los periodistas, y llegó a comparar al régimen de Daniel Ortega con una monarquía del siglo XVI. “Esto no es una República, aquí dependemos de la voluntad de un soberano y si toma la decisión de quitarte tu potestad legal, lo que nos queda es la protesta”, señaló.

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El aspirante a la Presidencia de Nicaragua no solo considera que la oposición debe ganar la Presidencia de la República sino que debe pujar para que haya un cambio en la correlación de fuerzas en el sistema político, especialmente obtener una mayoría en la Asamblea Nacional para  hacer las reformas necesarias al sistema de justicia. 

“La crisis de este Gobierno es de legitimidad, la única manera que este país puede recuperar su normalidad mínima es con un ejercicio electoral que goce con la aprobación del pueblo, si no es así, es un ejercicio fallido”, expresó.

Y es por eso que apuesta por la casilla del partido Ciudadanos por la Libertad, el vehículo en el que ha decidido la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia participar en los comicios: “CxL es el canal más relevante que nos puede llevar a esa unión que tanto deseamos”. 

Este miércoles, Arturo Cruz se reunió con Kitty Monterrey, presidenta de CxL, para conocer el proceso de inscripción de las candidaturas que empezó el pasado 16 de marzo. A la fecha solo Cruz y Juan Sebastián Chamorro han mostrado interés por someterse al proceso de elección.

“El partido más funcional desde el punto de vista de la realidad política de este país y de su organización es CxL. Insisto, es lo más inteligente”, dijo al ser consultado si sólo participará en las elecciones como precandidato de la Alianza Ciudadana. Sobre el proceso de inscripción, el aspirante se mostró satisfecho porque no se impuso una “fecha fatal”, algo que ve como “una gran apertura”. 

“Si hubieran puesto una fecha fatal, en el que se cierra el proceso de inscripción personalmente yo no me hubiera sentido a gusto”, señaló.  “Estoy dispuesto a conversar con el que sea, cuál es el problema de conversar con Ciudadanos, pero estemos claros que mi opción es Ciudadanos por la Libertad. Me siento muy a gusto con lo que representa Ciudadanos por la Libertad”, reiteró.

El precandidato también se refirió a los presos políticos del país al señalar que no puede haber participación electoral si siguen en las cárceles del país. “Es inaceptable”, enfatizó. En la conferencia de prensa fue cuestionado por su participación durante las protestas de abril de 2018 y dejó entrever que tuvo participación discreta y efectiva.

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Otro tema por el que fue consultado es sobre su nombramiento como embajador de Daniel Ortega en Washington durante 2007 y 2008. En su defensa dijo que lo hizo por el interés nacional, pues había temas que no se podían “perder” y en los que “ya se había avanzado” como los empleos del tratado de libre comercio Cafta-Dr y la Cuenta Reto del Milenio. 

“Había que dar un elemento básico de tranquilidad. Había terror en Nicaragua cuando él (Ortega) ganó las elecciones, de que volvíamos a las década de los 80. Era indispensable tener a un representante en Estados Unidos que calmara todas esas inquietudes y debo decir que yo me separé del cargo, a mí no me separaron”, comentó.