¿Cómo afectará las remesas la reforma a la Ley de Consumidores?
Asobanp pidió a los diputados orteguistas considerar las reformas a Ley de Consumidores, sin embargo no fue escuchada. Los cambios arriesgan a uno de los pilares que sostiene la economía de Nicaragua que representan más del 14.8% del PIB.


- febrero 08, 2021
- 10:48 PM
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El régimen de Daniel Ortega ha defendido la reforma a la Ley de Protección de los Derechos de las Personas Consumidoras y Usuarias (Ley 842) con el argumento de proteger los intereses de los nicaragüenses, pero los economistas sostienen que esta pone en riesgo la recepción de remesas a través de los bancos privados, que, según el Banco Central de Nicaragua (BCN), captaron el 63.5% de estos flujos en 2020.
Las remesas representan un 14.8% del Producto Interno Bruto (PIB) del país y con la modificación a la Ley que compromete la operatividad bancaria, resultaría afectado el principal canal para envío de dinero desde el extranjero: “El dictador, con tal de salvaguardar su patrimonio y a la mafia en el poder, irresponsablemente está colocando en riesgo la economía nacional, la economía de empresas, los trabajos en las zonas francas, a exportadores, importadores y a centenares de miles de familias que viven de las remesas”, dijo el economista Enrique Sáenz.
La Asociación de Bancos Privados de Nicaragua (Asobanp) en un carta a la Comisión de Producción, Economía y Presupuesto de la Asamblea Nacional pidió considera la reforma a la Ley 842, puesto que mandata que los proveedores de servicio no podrán negar “sin causa legal justificada la atención de solicitudes ni cancelar contratos o transacciones que legítimamente gestionada realicen las personas naturales o jurídicas públicas, privadas o mixtas”, a la vez que obliga a las entidades a “atender o restituir la prestación de bienes y servicios negados (…) si así se resolviese”.
La decisión obligará a mantener las cuentas abiertas de funcionarios e instituciones públicas sancionadas por Estados Unidos y la Unión Europea y pone en peligro las relaciones de los bancos con instituciones financieras internacionales. “Esta decisión pone en riesgo al país de pasar de la lista gris en que encontramos a la lista negra que impone el Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI)”, advirtió la carta de Asobanp a finales de enero. La posición fue respaldada por diferentes cámaras que integran el Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep).
EN OPINIÓN: Una polvareda bancaria
NICARAGUA BAJO RIESGO DE EXCLUSIÓN FINANCIERA
Según Asobanp, ese cambio de listas provocaría “el cierre de las cuentas de corresponsalía bancaria, la imposibilidad de recibir remesas, de enviar o recibir transferencias internacionales, el cierre de líneas de crédito del exterior y cancelación de contratos con las marcas de tarjetas de crédito. Esto implica que Nicaragua sería excluida del Sistema Financiero Global”.
Los bancos privados de Nicaragua mantienen relaciones internacionales con corresponsales extranjeros, que hacen posible el comercio internacional, necesarios para importaciones, exportaciones, remesas y demás. De acuerdo con Asobanp, para mantener ese intercambio financiero deben tener políticas internas de prevención de lavado de dinero, con un enfoque basado en riesgo y el cumplimiento de las mejores prácticas y leyes internacionales.
“La iniciativa de ley impedirá a los bancos cumplir con estas obligaciones y, por ende, perjudica la relación con los corresponsales internacionales, fondeadores externos y marcas de tarjetas de crédito, perjudicando a todos los sectores de la población, pero principalmente, al productivo, comercio y remesas”, dijo la gremial que reúne a todos los bancos privados del país. Mario Arana, expresidente del Banco Central de Nicaragua, explicó que el hecho de que los bancos mantengan relación con un funcionario sancionado “contamina al banco en el extranjero y perfectamente pueden cortar las relaciones de corresponsalías”.
Desde la dictadura no se dimensiona el problema. El diputado Wálmaro Gutiérrez consideró la semana pasada que se pone al país en un mal “predicado frente al GAFI (Grupo de Acción Financiera Internacional)” y menos que pasen a Nicaragua de una lista gris en la cual se encuentra actualmente a una lista negra. “No hay por qué”, cuestionó el legislador. “Esta es una reforma positiva, una reforma necesaria”, dijo Gutiérrez.
REMESAS COMO PILAR ECONÓMICO
El informe de noviembre DE 2020 es el último emitido por el Banco Central que ofrece detalles sobre los canales de recepción de remesas y que confirma que más de la mitad de estas ingresan al país a través de la banca. En enero de 2020, la autoridad monetaria nacional informó que Nicaragua registró un aumento en los envíos de dinero desde el exterior, alcanzando US$1,851.4 millones, un 10% más que en 2019, cuando fueron de US$1,682.4 millones, pese a que los expertos auguraron una caída por la pandemia de coronavirus.
A FONDO: Ortega contra la banca
El Informe Trimestral de Remesas de 2020 indica que hasta ese mes vinieron al país US$481.7 millones a través de agencias especializadas y bancos comerciales. Las agencias especializadas captaron el 36.4%, mientras que los bancos comerciales el 63.5% de los flujos, es decir que las primeras canalizaron US$175.3 millones ( 7% mayor a US$163.8 millones observado en 2019) y los segundos US$306.4 millones (30% mayor a los US$235.7 millones de 2019).
Las principales fuentes de origen de las remesas en 2020 fueron las procedentes de Estados Unidos, con el 60%; seguido de España (14,7%), que desplazó del segundo lugar a Costa Rica (14,6%). Así, Estados Unidos no sólo es el principal socio comercial de Nicaragua sino que es el país con mayor emisión de remesas.