Sandinistas liberan cuentas de la Alcaldía de Wiwilí tras inhabilitar a liberales electos

Cinco cuentas bancarias de la Alcaldía de Wiwilí, Jinotega, que permanecían embargadas desde el 15 de mayo fueron habilitadas nuevamente este miércoles por orden de la titular del Juzgado de Distrito del Trabajo y de la Seguridad Social de Matagalpa, Aida López. 

El monto total de las cinco cuentas bancarias asciende a dos millones 167 mil 477 córdobas. El dinero estaba embargado desde mayo como parte de un proceso judicial que puso en marcha el régimen de Daniel Ortega para separar de sus respectivos cargos a la alcaldesa liberal Reyna Hernández y al vicealcalde Manuel Blandón, para luego suplantarlos por concejales del Frente Sandinista. 

Reyna Hernández, alcaldesa electa por voto popular e inhabilitada de su cargo, señala que el plan para arrebatarles la alcaldía inició en agosto de 2018 con una demanda laboral de 40 extrabajadores por una suma de 16.5 millones de córdobas.  

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Según la alcaldesa, a los trabajadores nunca se les negó la indemnización laboral cuando renunciaron a sus puestos o se les canceló el contrato laboral, y que lo que en realidad debían pagar eran dos millones de córdobas, aproximadamente.  

Con las cuentas de la Alcaldía sin fondos suficientes para afrontar la demanda, en parte por el bloqueo de las transferencias municipales de parte del régimen, la deuda era impagable.  

La alcaldesa propuso un acuerdo de pago que fue rechazado por los demandantes y el caso llegó al juzgado de Distrito del Trabajo y de la Seguridad Social de Matagalpa. En el juzgado el 10 de octubre de 2018 se ordenó a la alcaldesa pagar la millonaria indemnización. 

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“Ya en este escenario la demanda quedó con 36 extrabajadores, y el 15 de mayo de este año tras no llegar a un acuerdo, la juez decidió embargar las cuentas y bienes particulares de la municipalidad por un monto de 16,538,128. 93 córdobas”, detalló Hernández. 

INHABILITADOS POR "DESACATO DE AUTORIDAD" 

Cinco días después que embargaran las cuentas y bienes de la comuna, la Fiscalía acusó a la alcaldesa electa por desacato de autoridad ante la juez Diana Jarquín Valle, quien el 28 de julio la declaró culpable la inhabilitó de su cargo por un período de 2 años.   

Tras la salida de Hernández, el vicealcalde pasó a ocupar la silla edilicia, pero seis días después, la juez laboral le notificó que tenía que pagar a los extrabajadores en un plazo de 72 horas y al no poder cumplir por falta de capacidad económica y permanecer con las cuentas embargadas, le aplicaron el mismo proceso judicial que su antecesora para inhibirlo por dos años. 

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De esa manera el FSLN logró sacar de la alcaldía a los dos funcionarios electos y el 27 de octubre nombraron como alcaldesa a Helen Toruño y como vicealcalde a Miguel Guerrero, pero a la vez colocaron al concejal Celso Amador como nuevo secretario municipal, en sustitución de Alba Marina Cárdenas. 

“Tras colocar a los concejales sandinistas en estos puestos, la demanda laboral se apagó y tal y como se esperaba la juez laboral levantó el embargo”, explicó la alcaldesa electa por los habitantes de Wiwilí. 

Según la cédula judicial emitida el 16 de diciembre, la juez laboral ordenó levantar el embargo ejecutivo de las cinco cuentas porque con dichos fondos se cumplirá con el pago de los trabajadores.