Organismos de DD.HH. exigen a Almagro que respete autonomía e independencia de la CIDH
La presidenta de Cenidh, Vilma Núñez de Escorcia, considera que Luis Almagro está recibiendo presión externa para sacar a Paulo Abrão de la CIDH.
- agosto 25, 2020
- 10:33 AM
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La crisis interna provocada por la decisión del Secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, de no ratificar en su cargo al secretario ejecutivo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Paulo Abrão, es producto de presiones externas, asegura la presidenta ejecutiva del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos, Vilma Núñez.
Núñez considera que el trabajo que realiza la CIDH “molesta a los gobiernos violadores de derechos humanos, entonces no sería nada extraño pensar de que el Secretario General está siendo sometido a presiones políticas para actuar de esta manera, por lo cual le hacemos un llamado para que rectifique y cumpla lo que está establecido en las normas y jurisprudencia comisión y en la jurisprudencia de la Corte Interamericana”.
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“Esperamos que el doctor Almagro resista a las presiones que está recibiendo de afuera. No quiero pensar en compromisos y se dé cuenta que se está extralimitando en su ejercicio administrativo de sus funciones en su relación en cuanto al personal Comisión Interamericana de Derechos Humanos”, recalcó.
Agregó que Almagro tiene que respetar la autonomía de la CIDH, que incluye el nombramiento de Abrão como secretario ejecutivo, porque representa un reconocimiento a su buena gestión en defensa de los derechos humanos.
“El Secretario General (Luis Almagro) tiene que respetar el nombramiento, renovación del mandato que la Comisión, basada en su propio reglamento y para darle transparencia eligió a su secretario ejecutivo. El secretario general no puede decir no voy a pagar al secretario ejecutivo”, dijo Núñez.
DECISIÓN UNILATERAL
La presidenta del Cenidh expresó su preocupación por esta nueva crisis en el seno de la OEA, sin embargo, considera que será superada una vez más, porque se trata de un trámite administrativo, en la que Almagro no quiere reconocer el pago de los honorarios de Abrão.
“No sería la primera vez que la Comisión Interamericana, precisamente por su labor al frente de las violaciones de derechos humanos y al frente prácticamente de los violadores de derechos humanos, sobre todo los regímenes dictatoriales, en diferentes momentos enfrentan crisis de esta naturaleza”, dijo Núñez.
Paulo Abrão había sido ratificado en su cargo para el periodo 2020-2024 por la CIDH en una asamblea celebrada en México en enero, y lo decidido fue inmediatamente comunicado a Almagro, según expone el organismo.
La CIDH sostiene que el Secretario General de la OEA tomó esa decisión de manera unilateral, “sin consulta previa” y, por tanto, la califica como “un franco desconocimiento de su independencia y autonomía, que busca la separación de facto del Secretario Ejecutivo, y dejar sin efectos la decisión de renovación adoptada 8 meses antes por la CIDH. No deja de llamar la atención de la CIDH que, durante ese lapso no recibió cuestionamiento alguno por parte del Secretario General sobre la pertinencia del procedimiento de renovación”.
VIOLENTA ESTATUTOS DE LA CIDH
La presidenta del Cenidh considera que Almagro está violentando los estatutos de la Comisión Interamericana que establece que “le corresponde a ésta nombrar a su secretario ejecutivo de la Comisión”.
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“La Comisión Interamericana de Derechos Humanos de conformidad con su reglamento interno, tiene la facultad para nombrar al secretario ejecutivo, quien es el que le da, y como tal, el vínculo de que la Comisión tiene autonomía administrativa, y el vinculo que tiene la secretaría con la Secretaría General de la OEA, es una relación de carácter contractual, y él (Almagro) lo que hace es un nombramiento administrativo”, apuntó Núñez.
La presidenta del Cenidh dijo que la CIDH debe recurrir a la jurisprudencia dictada por la Corte Interamericana de Justicia, en el sentido de que el organismo de derechos humanos goza de autonomía para la selección de su secretario ejecutivo.
“No puede ser que por razones meramente administrativas, tenga la Secretaría General facultades para nombrar o para impedir el nombramiento de un órgano tan importante como es la secretaría ejecutiva de la Comisión”, reiteró Núñez.
Agregó que la única repercusión que genera el no reconocimiento de Abrão es que la OEA no le pagará su salario, lo que obstaculiza su funcionamiento, “pero eso es lo que hay que buscar como evitar y creo que lo que nos corresponde como organismos de derechos humanos, como defensores de derechos humanos es litigios permanente ante los órganos de la comisión y las víctimas”.
ALMAGRO ARGUMENTA NEGLIGENCIA
Almagro afirmó que ha recibido denuncia sobre la mala gestión del trabajo realizado por Abrão, sin embargo, Núñez de Escorcia afirma Almagro no puede hacer “imputaciones a ciegas, y por otro lado me parece que no es de extrañar el comportamiento del Secretario General, porque ya es conocido que su discurso se acomoda a las diferentes circunstancias, en algún momento tiene un enfoque y cambia de opinión”.
“Entonces pienso que a lo mejor obedece a una situación de imprecisión de la información que maneja y se encamina a obstaculizar el trabajo de la Comisión, porque de todos conocido que el trabajo Comisión ha tenido ha tenido un repunte importantísimo en la medida en que se empezó a aplicar su plan estratégico que termina en el 2021”, dijo la presidenta de Cenidh.
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Por su parte, Gonzalo Carrión, del Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca +, demandó el respeto a la autonomía e independencia de la CIDH.
“La CIDH ha verificado in situ y Abrão ha visibilizado las graves violaciones a derechos humanos. Gracias a la labor de la Secretaría a cargo de Pablo Abrão la CIDH está estrechamente vinculada a la realidad de lo que sucede en Nicaragua y la situación es conocida en el mundo (…) demandamos respeto pleno a su autonomía e independencia” manifestó Carrión.