“Compré las campanas de manera inocente”, afirma excanciller Aguirre Sacasa tras ser liberado por la Policía

El excanciller Francisco Aguirre Sacasa interpreta su detención por parte de la Policía Orteguista como una represalia política del régimen de Daniel Ortega por su postura crítica. Este sábado fue presentado como “delincuente” al atribuirle la compra de dos campanas robadas de una iglesia de Granada, pero el exdiplomático alega inocencia.  

Aguirre Sacasa fue puesto en libertad tras permanecer detenido por varias horas en la Dirección de Auxilio Judicial, pero el proceso legal en su contra continúa. Es señalado de ser el receptor de objetos robados, un delito popularmente conocido como “tope”. 

“A mí no me han acusado de robarme las campanas, pero sí soy el comprador de última instancia y te afirmo que lo hice de una manera inocente y que por eso tendré que contratar un abogado y el proceso continúa, tengo que ir a este juicio”, declaró Aguirre Sacasa a DESPACHO 505. 

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— El que me la vendió a mí me dijo enfrente de todos los policías: “perdóneme doctor Aguirre, yo nunca sabía que esa campana era robada”. Él dice que no es uno de los ladrones, sino que se la compró a otro de los que están capturados.  

En breves declaraciones a DESPACHO 505, el excanciller Aguirre Sacasa dijo que “esto es una represalia política, esto tiene nombre y apellido, es un mensaje. Esto es una cuestión que tiene tintes políticos por todos lados”.  

PODRÍA SER CONDENADO A TRES AÑOS DE PRISIÓN

El abogado penalista Manuel Nicaragua, explica que para procesar judicialmente al excanciller por el delito de receptor de objetos robados, conocido popularmente como “Tope”, se tiene que comprobar que tenía conocimiento de la procedencia ilícita de los mismos. 

“La pena de este delito oscila entre 1 y 3 años de cárcel, la única manera que se le puedan retirar los cargos a este señalado, es que el afectado (iglesia) desista del proceso judicial”, explicó. 

El abogado menciona que, si el representante de la iglesia decide llegar a un acuerdo, Aguirre Sacasa perdería lo que pagó por las campanas y se exoneraría de la pena que se le puede llegar a imponer.