Atentado en Catedral: Versión policial es increíble
La Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) y la Santa Sede indicaron que se trató de un atentado y exigieron una investigación independiente y creíble.
- agosto 04, 2020
- 08:07 AM
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Las conclusiones inverosímiles de la investigación sobre el atentado en la Catedral de Managua se dan en momentos que la iglesia Católica vive sus momentos más álgidos. No hay credibilidad en la Policía Orteguista, mientras aumentan los ataques a parroquias y religiosos del país.
Ayer la Policía presentó un informe que dejó más preguntas que respuestas, pero a la fecha no ha habido una reacción oficial por parte de la Arquidiócesis de Managua, aunque todo apunta a un atentado terrorista contra la Iglesia.
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La Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) y la Santa Sede también indicaron que se trató de un atentado y exigieron una investigación independiente y creíble.
“Creo que la versión anticipada de Rosario Murillo hablando de veladoras y cortinas, que no existen en la capilla, ha puesto al régimen en una situación muy comprometida y de la que es difícil que salga pronto. No tengo seguridad de que el cardenal Brenes lleve la contradicción entre la versión de la Iglesia y la de ella hasta el final, aunque es lo que correspondería”, dijo una fuente cercana a la CEN.
Las investigaciones policiales concluyeron que no hubo mano criminal, y el incendió que calcinó a la imagen de la Sangre de Cristo, fue provocado por un atomizador que contenía alcohol en gel y unas veladoras que habrían dejado devotos.
En un inicio, Rosario Murillo dijo que el incendio fue provocado por unas velas, aunque el cardenal Brenes dijo categóricamente que ahí no había.
“Ya hemos visto tres versiones erráticas de la Policía, y todas buscan hacerla coincidir con la versión de Murillo. Son una clara prueba de la falta de independencia de la Policía, lo que ya sabíamos. Nadie cree ninguna de esas versiones, tampoco sus seguidores”, aseguró la fuente.
Ortega declaró la guerra a la Iglesia en 2018, pero el ataque a Catedral es quizá el más grave de la última década. No sólo porque ocurrió en el máximo templo católico del país sino que se arrasó con la imagen de la Sangre de Cristo, de 283 años y una de las más veneradas del país.
“Aún es pronto para medir con claridad las consecuencias. Sólo una investigación independiente, dando seguridad a los testigos, podría esclarecer los hechos, pero en el ambiente que en torno a esta barbarie ha creado el propio régimen, esa investigación me parece un imposible”, agrega otra fuente religiosa consultada por Despacho 505.
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La experta en seguridad Elvira Cuadra asegura que el informe policial tiene poca credibilidad, principalmente porque la Policía no genera confianza entre la ciudadanía.
“La forma agresiva y el abuso de fuerza que usaron para interrogar a los testigos resta confianza, hay inconsistencia en los diferentes informes que han presentado”, señala Cuadra.
Desde su punto de vista, profundizar en las investigaciones significaría llegar a los responsables y autores intelectuales “y eso está vinculado a personas cercanas al Gobierno”.
Cuadra señala que las conclusiones se dan cuando hay un aumento de los ataques contra la Iglesia. Varios templos religiosos han extremado medidas para proteger los templos e imágenes de varios municipios del país, el más importante el caso de El Viejo, Chinandega.
La Arquidiócesis de Managua no descarta la posibilidad de realizar una investigación independiente sobre el atentado ocurrido en su catedral que dejó destruida la antiquísima imagen de la Sangre de Cristo.
El cardenal Leopoldo Brenes rechazó este martes los resultados de las investigaciones de la Policía Orteguista que determinó que en el incendio ocurrido en la Catedral de Managua el pasado viernes “no fue intencional, descartándose acción criminal”.
“Mantenemos nuestra postura de que eso fue una acción criminal, lo que nosotros dijimos el viernes (que fue un acto terrorista) lo mantenemos hasta este momento”, expresó Brenes en una entrevista con Canal 10.