Así es la iglesia de Roma que lleva el sello de Nicaragua: el templo del cardenal Brenes
El cardenal Leopoldo Brenes es titular de una parroquia en Roma. En su entrada destaca el logo de la Arquidiócesis de Managua, el símbolo que conecta a Nicaragua con el corazón de la Iglesia universal.


- Roma, Italia
- abril 28, 2025
- 03:51 AM
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¿Sabías que el cardenal Leopoldo Brenes tiene la titularidad de una parroquia en Roma? Esta asignación no solo es un honor simbólico, sino que también le otorga el derecho de participar en el Cónclave para elegir al próximo Papa.
Ubicada en el elegante barrio de Prati, en el corazón de Roma, la iglesia de San Gioacchino ai Prati di Castello (San Joaquín) fue asignada a Brenes por el Papa Francisco el 22 de febrero de 2014, cuando lo creó cardenal. Desde entonces, este templo de 127 años de historia simboliza su vínculo espiritual con la diócesis romana y su lugar en el Colegio Cardenalicio.
El Papa, además de ser jefe del Estado Vaticano, es el obispo de Roma. Tradicionalmente, los cardenales son considerados sus principales colaboradores y, aunque hoy provienen de todo el mundo, conservan el vínculo simbólico con Roma al recibir una iglesia titular, aunque no la gobiernen directamente.
El trabajo pastoral real del cardenal Brenes se desarrolla en la Arquidiócesis de Managua, que comprende las parroquias de Managua, Masaya y Carazo. Sin embargo, su presencia en Roma quedó sellada con su toma de posesión formal de San Gioacchino el 6 de octubre de 2014.
Una iglesia que une a Roma y Nicaragua
El sello nicaragüense en esta parroquia no pasa desapercibido. A la entrada del templo, los visitantes se encuentran con el logo de la Arquidiócesis de Managua, acompañado del lema "Tú me has enviado", en un homenaje visible y permanente al origen del cardenal Leopoldo Brenes.
Además, previo a la ceremonia de toma de posesión, se entronizó una imagen de la Inmaculada Concepción de María, la Purísima, patrona de Nicaragua, en una de las capillas laterales. Así, un símbolo profundamente nicaragüense quedó incorporado para siempre en este rincón romano.
San Gioacchino es una joya arquitectónica de finales del siglo XIX, diseñada por Raffaele Ingami. De estilo ecléctico, tiene planta de cruz latina, tres naves delimitadas por columnas de granito rosa con capiteles de bronce, y una impresionante cúpula de aluminio perforada con estrellas de cristal que bañan de luz natural el interior.
Además, el templo alberga 14 capillas laterales, cada una dedicada a una nación católica que contribuyó a su construcción, desde Brasil y Argentina hasta España, Francia e Irlanda. Todo el conjunto simboliza la universalidad de la fe católica.
Desde 1905, la iglesia está confiada a la Congregación del Santísimo Redentor (Redentoristas).
Una parte de Nicaragua también está en Roma.