Declaran culpable a mujer que mató a su pareja "en defensa propia" en Carazo
El juez desestimó que se tratara de un caso en defensa propia, como alegó la mujer. La Fiscalía pide 17 años de cárcel.
- Jinotepe, Carazo
- diciembre 21, 2024
- 08:45 AM
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Yanilda Cantillano Amador, de 38 años, fue declarada culpable del delito de parricidio por el juez José Cortés Domínguez, del Juzgado Primero de Distrito Penal de Juicio de Carazo. La mujer mató a su cónyuge, Luis Herrera Moncada, de 55 años, usando el mismo cuchillo con el que él presuntamente intentaba asesinarla. El juez desestimó que se tratara de un caso de defensa propia.
Tras el fallo, el Ministerio Público solicitó una pena de 17 años de prisión para Cantillano.
El crimen ocurrió la noche del pasado 20 de agosto en Jinotepe, Carazo, donde la pareja convivía junto a sus hijos de 18 y 4 años. Durante el juicio, que concluyó el 16 de diciembre, Cantillano narró el contexto de violencia doméstica que marcó su relación con Herrera.
Según su testimonio, él la maltrataba física y verbalmente, además de amenazarla constantemente con matarla si lo abandonaba o intentaba denunciarlo.
"Toda la vida me ofendía, me insultaba y me golpeaba el estómago y las piernas para que nadie viera los moratones", relató la mujer en el juicio. También señaló que Herrera era consumidor habitual de drogas, bebía alcohol constantemente, y había dejado de trabajar desde hacía años, por lo que el sustento del hogar recaía exclusivamente en ella.
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El día de los hechos
Según el testimonio de la acusada, el 20 de agosto el hombre se molestó porque ella salió tarde del trabajo. Al llegar a casa, la llevó a la habitación y comenzó a insultarla y amenazarla con un cuchillo. Durante el forcejeo, el hijo mayor de la pareja intentó intervenir, lo que permitió a la mujer salir de la habitación y pedir ayuda a los vecinos. Sin embargo, sus gritos fueron ignorados.
En la sala de la vivienda, el enfrentamiento continuó. Según la fiscalía, el hombre cayó sobre un colchón y fue entonces cuando ella lo apuñaló en el costado derecho del cuello, lo que le causó la muerte. Aunque inicialmente trató de simular un suicidio, la policía determinó que se trataba de un homicidio tras realizar las investigaciones correspondientes.
Las pruebas presentadas en el juicio confirmaron que, al momento de los hechos, el hombre estaba bajo los efectos de cocaína. También corroboraron que la mujer solicitó ayuda a los vecinos, quienes no atendieron sus llamados ni alertaron a las autoridades.