Abogan por una ampliación del TPS para nicaragüenses en Estados Unidos

Organizaciones defensoras de los derechos de los migrantes en Estados Unidos han lanzado una campaña de recolección de firmas para presentar a la administración de Joe Biden una solicitud de ampliación y "redesignación" del Estatus de Protección Temporal (TPS). Actualmente, esta medida protege a los nicaragüenses que llegaron al país en 1998 tras el Huracán Mitch, pero las organizaciones buscan que también abarque a quienes emigraron después de ese año.

La iniciativa, liderada por la organización Defensa Legal y Recursos Educativos para Inmigrantes (NALDEF, por sus siglas en inglés), tiene como meta recolectar 100,000 firmas para respaldar el pedido que será enviado a la Casa Blanca. Los activistas esperan alcanzar este objetivo antes del 20 de enero de 2025, cuando culmina el mandato del presidente Joe Biden.

Esta propuesta busca amparar a cerca de 550,000 nicaragüenses que actualmente residen en Estados Unidos, así como a quienes se han visto forzados a emigrar debido a la crisis sociopolítica que atraviesa Nicaragua. Los detalles de la campaña se expusieron en el foro TPS para Nicaragua: Sesión Informativa y Campaña de Firmas en Doral, Florida, realizado en Miami.

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Entre los participantes del evento estuvieron los activistas Claudio Acevedo y Bertha Sandles, junto a la concejal de la ciudad de Doral, Maureen Porras. Porras subrayó la necesidad de incluir a los miles de nicaragüenses que han llegado recientemente al país huyendo de la represión y la crisis que afecta a todos los sectores de la sociedad.

Aunque reconoció que el TPS "es un beneficio temporal que no otorga ningún otro estatus migratorio", destacó su importancia al permitir que los beneficiarios accedan a empleos y otros beneficios sociales, facilitando su integración en Estados Unidos sin caer en la irregularidad.

Porras también recordó que la extensión automática del permiso de trabajo para los actuales beneficiarios del TPS es válida hasta el 9 de marzo de 2025, lo que ofrece un alivio temporal mientras continúan los esfuerzos por ampliar esta medida.

Porras, instó a la administración Biden a rediseñar el TPS para a los miles de nicaragüenses que llegaron después de la primera designación y que no pueden aplicar al estatus, debido a las condiciones del país y su situación migratoria. “Estamos aquí para abogar por la redesignación a miles de nicaragüenses que necesitan esta protección”, subrayó.

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La propuesta se enmarca en un contexto de creciente migración nicaragüense hacia Estados Unidos, impulsada por la crisis política, económica y social en Nicaragua. 

Organismos internacionales y defensores de derechos humanos han señalado que este flujo migratorio representa no solo un desafío para las políticas de inmigración de Estados Unidos, sino también una oportunidad para implementar soluciones humanitarias y sostenibles a largo plazo.

Se espera que la presión social y las acciones de organizaciones pro-migrantes logren sensibilizar a la administración Biden y garantizar protección a miles de familias nicaragüenses que enfrentan condiciones de extrema vulnerabilidad.