Dictadura destierra a periodista Henry Briceño y confisca todas sus propiedades

El empresario y periodista Henry Briceño fue desterrado junto a su familia horas después del su violento arresto el pasado 24 de noviembre, cuando se encontraba en su casa de habitación en el municipio de San Rafel del Sur, en Managua.

Briceño fue detenido la tarde del 24 de noviembre durante una redada de la Policía Orteguista contra opositores, médicos y periodistas independientes, horas después que los diputados reformaron la Constitución Política a la medida del dictador Daniel Ortega y su esposa Rosario Murillo.

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El violento operativo estuvo a cargo del comisionado mayor Lázaro Clemente Quintanilla Álvarez, quien llegó con cuatro patrullas y 20 agentes policiales e irrumpió en su vivienda y lo acusó de ser el líder de la oposición en su municipio.

“Nos llevaron en vehículos distintos, sin permitirnos llevar nada, ni siquiera nuestros pasaportes. La violencia fue extrema, y el trato hacia mi hijo de 11 años fue absolutamente irrespetuoso”, expresó Briceño en una entrevista brindada al medio Confidencial.

Briceño relató que el operativo era dirigido vía telefónica por el comisionado general Horacio Rocha, asesor presidencial del dictador Ortega en temas de seguridad y fue desterrado junto a su esposa, una hija y su hijo de 11 años de edad.

Desterrado a Costa Rica

El comunicador dijo que tras ser arrestado, los agentes policiales lo trasladaron a la frontera de Peñas Blanca, donde miembros del Ejército les entregaron los pasaportes recién impresos y además les tomaron fotografías y videos antes de cruzar la vereda.

“Nos desterraron como si fuéramos criminales. Mi familia no merecía esto. El peor golpe fue hacia mi hijo, quien fue expulsado de su país sin ningún tipo de compasión”, expresó Briceño visiblemente afectado.

Al llegar a territorio costarricense, fue recibido por oficiales de migración de ese país, quienes los trataron con dignidad y le ofrecieron apoyo para trasladarlo a San José al día siguiente.

“Alguien tiene que responder por lo que nos hicieron”, finalizó Briceño, quien también señaló que pondrá su denuncia ante organismos nacionales e internacionales de derechos humanos.

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A pesar que Briceño ya había heredado sus propiedades a sus hijos, la Policía mantiene tomados los negocios y la vivienda, en clara señal de confiscación.