Prohíben publicar la carta del Papa en los medios digitales de la Iglesia católica

Las autoridades de la Iglesia católica de Nicaragua han orientado a las parroquias de diferentes diócesis del país no difundir en sus medios digitales y redes sociales la carta pastoral enviada este lunes por el papa Francisco por temor a “represalias” por parte de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo.

La información fue confirmada a DESPACHO 505 por la abogada e investigadora Martha Patricia Molina, quien señaló que “no se le está dando difusión para que “no haya esa sed de venganza” por parte del aparato represor del régimen. 

“Ha habido una orientación hacia las páginas digitales de las diferentes parroquias de que no se difunda el mensaje del papa Francisco por el tema de las represalias que puede tener la Policía en contra de los sacerdotes, entonces no le están dando la difusión, esa fue la orientación para que no haya esa sed de venganza que tiene la dictadura”, insistió Molina.

Otra fuente cercana a la Iglesia católica dijo a DESPACHO 505 que en la Diócesis de León, que dirige el obispo René Sócrates Sándigo Jirón, quien ha sido criticado por su cercanía a la dictadura, “se prohibió a los comunicadores de las parroquias publicar la carta” y que la comunicación había sido bajada desde la Coordinación de comunicación de la pastoral.

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El Papa reconoce las “dificultades” de la Iglesia

En la carta pastoral enviada por el papa Francisco al pueblo de Nicaragua en ocasión de la celebración de la Purísima, reconoce las “dificultades”, “incertidumbres” y “privaciones” que atraviesa la Iglesia católica de Nicaragua y resalta que “la libertad nadie nos la puede arrebatar”.

“Pienso particularmente en la oración del Rosario (...). Recitando el Rosario, estos misterios atraviesan la intimidad de nuestro corazón, ahí donde se cobija la libertad de las hijas y los hijos de Dios, que nadie nos puede arrebatar. Cuántas gracias recibimos del Rosario, es una oración poderosa”, expresa el papa en la carta.

Francisco expresa su cercanía en medio de la persecución del régimen Ortega-Murillo que ha encarcelado y desterrado a sacerdotes y obispos, asediado templos y acusado a la Iglesia de ser parte de un supuesto intento de golpe de Estado desde abril de 2018.