Más 2.000 empleados han sido despedidos del Estado y la barrida continúa

Al menos 2.196 trabajadores del Estado de Nicaragua han sido despedidos en lo que va de 2024, según datos del Ministerio de Hacienda a los que accedió DESPACHO 505.  Estas bajas corresponden a las instituciones públicas cuya planilla depende del Gobierno Central y son las primeras evidencias de la compactación ordenada por el régimen de Da iell Ortega y Rosario Murillo.

La mayoría de despidos se viene ejecutando desde el mes de agosto pasado, cuando la sancionada vocera del régimen, Rosario Murillo, anunció una “barrida” en el Estado. 

La planilla del Gobierno Central está distribuida en siete categorías ocupacionales: dirección, servicios administrativos, técnico científico, docencia, servicios generales, producción y salud. 

En los datos que recoge el reporte de empleo público de Hacienda no se incluyen a las alcaldías y otras dependencias autónomas con presupuesto y personal propio donde también se implementan despidos, ya que la orden de recorte del gasto público fue bajada a todos los niveles.

Los datos de la compactación 

Al cierre del año 2023, la planilla del Gobierno Central reportada por el Ministerio de Hacienda estaba compuesta por 112.522 empleados. Según datos oficiales, para el mes de octubre se redujo a 110.326 servidores públicos. Al menos 1.700 rescisiones de contrato se reportan entre agosto y octubre, en el contexto de una ola de despidos que continúa. 

Las áreas más afectadas son las de personal docente, técnico científico, servicios generales, administrativos y salud. 

Según los datos de Hacienda, este año han despedido a 711 trabajadores en el sector docencia; 449 trabajadores del personal técnico científico; 347 en servicios generales; 284 despedidos de los servicios administrativos; 227 en el sector salud; 129 trabajadores de los cargos de dirección y 49 despedidos en producción. El informe de Hacienda no detalla la cantidad de despidos por institución o ministerios.

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La barrida en el Estado

El pasado 3 de agosto, la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo anunció un proceso de "autoevaluación" de sus programas, proceso que incluye una evaluación de sus "aciertos y desafíos" y que tendría como resultado un "ordenamiento, reestructuraciones y rediseños" de con el objetivo de "promover el ahorro y la eficiencia en el gasto y la gestión pública". 

Son los eufemismos utilizados por la vocera del régimen para justificar la ola de despidos en el sector público. 

La medida no habla de una crisis financiera en el Estado ni se ha ofrecido una proyección del ahorro que buscan. Sin embargo, los datos de Hacienda a los que accedió DESPACHO 505 muestran una tendencia de despidos creciente desde el mes de agosto. 

El Estado de Nicaragua es el principal empleador en el país. Hasta el cierre del año pasado había unas 170 mil plazas de trabajo.

En los últimos meses se han reportado despidos generalizados en la Corte Suprema de Justicia, ministerios como el Mefcca y universidades como la Casimiro Sotelo y la Agraria.