Los ataques contra personas LGBTI se duplican: 108 casos y ocho muertes violentas en 2024

Los ataques contra personas lesbianas, gais, bisexuales, transexuales, intersexuales y no binarias han aumentado un 157% en lo que va del año, refleja un informe del Observatorio LGBTIQ+ de Nicaragua.  

Entre enero y septiembre de este año se documentaron al menos 108 casos de violencia, incluidas ocho muertes violentas. En todo el 2023 se registraron 43 casos.  

Los 108 casos de violencia y agresiones han sido denunciados por 89 personas, según el informe titulado 'La cara de la violencia hacia personas LGBTIQ+ de Nicaragua'. 

Los principales tipos de violencia denunciados han sido verbal, con 32 casos; estatal (28); física (28), sexual (10); laboral (8) y ocho muertes violentas. 

Los datos son un subregistro, ya que muchas víctimas no se atreven a denunciar por el cierre total del espacio cívico y la inacción de las autoridades.  

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Las mujeres trans son las principales víctimas 

En el mes de julio se reportó el asesinato de una mujer trans en Camoapa, Boaco. Era conocida como Abigail, no hubo muchos detalles, salvo que fue encontrada muerta con múltiples golpes en su cuerpo, aparentemente a manos de su pareja afectiva. La Policía no investigó el caso y quedó impune.  

De acuerdo con las estadísticas recopiladas, la mayoría de los casos de violencia han ocurrido en el ámbito familiar, durante el ejercicio del trabajo sexual, y en espacios públicos como calles, bares y discotecas. 

“Los datos son escasos y los que se encuentran disponibles indican que en Nicaragua las personas con orientaciones sexuales e identidades de género diferentes de la heterosexual se enfrentan a altos índices de violencia”, advirtió el observatorio. 

Además, los procesos de denuncia frecuentemente tienen trámites que complejizan aún más la protección efectiva de sus derechos. 

Falta formación institucional 

Las víctimas de estas agresiones y actos de discriminación muchas veces no cuentan con el apoyo de familiares, amistades o redes comunitarias para responder a las agresiones.   

“Los reportes nos dicen que en la mayoría de los casos son ellas- las víctimas- enfrentándose a los agresores que actúan con total impunidad, más aún, si son cercanos a las estructuras partidarias que controlan a todas las instituciones”, señalan. 

Las personas LGBTI+ no siempre denuncian agresiones en su contra porque no son tomados en serio por las autoridades policiales, lo que los convierte en personas vulnerables ante la violencia.  

“En nuestro Código Penal existe el delito de discriminación, pero si una persona de la diversidad va a interponer alguna denuncia, la denuncia no es captada, porque es gay, es lesbiana, ´porque anda en la calle´, porque ´toma licor´, entonces, no es bien visto en la Policía”, dice una activista nicaragüense que pide omitir su nombre. 

Las denuncias son recopiladas a través del correo [email protected].