Pastores evangélicos halagan a Ortega por permitirles conmemorar la traducción de la Biblia al español

Los pastores evangélicos a fines a la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo se volcaron en halagos por permitirles celebrar los 455 años de la traducción de la Biblia al español. Los seguidores de algunas de las iglesias protestantes celebraron un acto en la Plaza de la Biblia, en Managua, mientras que a otros pastores y católicos se les niega el derecho a la libertad religiosa. 

En el evento que comenzó a realizarse en distintos puntos de Managua desde la tarde del viernes, han estado presente Johanna Flores, ministra de la Familia y Brenda Flores, coordinadora del Movimiento Cultural Leonel Rugama y Lucién Guevara, ministra de la Mujer. Todas en representación de la dictadura.

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La celebración del aniversario de la traducción de la Biblia al español fue realizada por la dictadura en un contexto en que la iglesia Católica es reprimida y perseguida. El pastor Francisco Martínez Tinoco, presidente de la Federación de Iglesias Evangélicas de Nicaragua, ocupó la celebración evangélica para “agradecer” a la pareja dictatorial por permitirles la celebración que fue coordinada por el mismo régimen.

En la celebración, estuvo presente Omar Duarte, un pastor evangélico representante de Río de Agua Viva, quien ha sido duramente criticado por los nicaragüenses y los mismos evangélicos por plegarse a la dictadura y guardar silencio sobre las cancelaciones de las personería jurídica de decenas de iglesias evangélicas y la confiscación de los bienes de las asociaciones.

Funcionarios promueven discurso oficialista

Brenda Flores, del movimiento Leonel Rugama, dijo que la juventud nicaragüense fue la encargada de transmitir “el saludo” de la pareja gobernante a los evangélicos, afirmando que el régimen reconoce el trabajo de los evangélicos.

“Reciban de parte, de nuestra jefatura nacional, del comandante Daniel Ortega y la compañera Rosario ese afectuoso saludo y reconocimiento al enorme trabajo que hace nuestra comunidad cristiana, al llevar las buenas nuevas de salvación al pueblo nicaragüense”, expresó la funcionaria sandinista.

Por su parte, Johanna Flores señaló que la palabra de Dios debe ponerse en práctica en la sociedad, a quienes llamó al perdón y la reconciliación. La funcionaria omite que  Ortega ha dividido a las familias al encarcelar y desterrar a opositores, obispos, sacerdotes, periodistas y críticos a la dictadura.

“Las enseñanzas bíblicas nos hablan de un amor incondicional, ese mismo amor que Dios tiene por nosotros. Ese es el amor que debemos fomentar en nuestras familias, en nuestras comunidades, un amor que no discrimina, que perdona y que acoge”, expresó Flores, sin mencionar que a diario Rosario Murillo emite virulentos mensajes contra los opositores y la iglesia Católica.

La celebración del 455 aniversario de la traducción de la Biblia al Castellano, llegó 23 días después que la dictadura excarceló y desterró a Guatemala a 135 presos políticos, entre ellos 13 pastores evangélicos de la congregación evangélica “Puerta de la Montaña”.

En el culto, a los evangélico se les prohibió ondear las banderas de Israel y de Nicaragua y fueron utilizadas solo para las tomas de fotos oficiales del evento.

El secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin, denunció en la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU) la persecución religiosa en Nicaragua y abogó por un diálogo con el régimen.

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Parolin dijo que la Santa Sede “sigue con atención” lo que está ocurriendo en Nicaragua y que está “especialmente preocupada” por las medidas que el régimen ha adoptado contra el personal y las instituciones de la Iglesia, como la persecución, detenciones y destierro de sacerdotes y otros religiosos, el cierre de oenegés como Cáritas, confiscación de colegios y bienes, la reciente imposición de impuestos, entre otros.