Estados Unidos revoca la visa a Juan Caldera

El Gobierno de Estados Unidos le revocó la visa de turismo al simpatizante orteguista Juan Caldera, según reveló él mismo en una publicación en sus redes sociales.

“Estados Unidos a través de un correo electrónico revoca mi visa de turista que desde hace 3 décadas tenía, a esta medida apelé por medio de una firma de abogados para migración de Miami, y como resultado de la gestión, recibí un no a mi apelación”, explica Caldera en una publicación en su perfil de Facebook.

El comerciante se mostró sorprendido porque el Departamento de Estados “da a entender que yo soy un peligro para Estados Unidos”. En medio de su inconformidad, Caldera tildó de “pendejos” a las autoridades del país norteamericano.

“Estos jodidos si están bien pendejos al indicar que soy un peligro para Estados Unidos, que locuras las que hace el Gobierno de Joe Biden”, agrega el defensor de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo. 

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Esperanza en que Trump el devuelva la visa

Juan Caldera tiene la esperanza de que Donald Trump se alce con la victoria de presidencia de Estados Unidos en las próximas elecciones del 5 de noviembre de este 2024 y con ello “el nuevo gobierno republicano recapacite en este tipo de medidas y respete los derechos de los turistas a Estados Unidos”.

En una visita que el empresario nicaragüense realizó a Estados Unidos en marzo del año pasado, fue increpado por un grupo de compatriotas en un estadio en Miami, que lo señalaron de “asesino” por su supuesta participación en la represión de 2018. El escándalo provocó la salida de Caldera del recinto deportivo.

Las inconformidades de los nicaragüenses que se encontraban en el estadio de los Marlins, tienen origen en las fotografías que circularon en redes sociales en las que se ve a Caldera empuñando un arma junto con otro grupo de personas aparentemente “paramilitares” armados por el régimen, mismas que el empresario ha justificado aduciendo que estaba armado para proteger los tramos ante los saqueos que amenazaban a los mercados de Managua, durante las revueltas del 2018.