La Policía secuestra al padre Danny García de Muy Muy

Feligreses reportan la detención del párroco de la Iglesia San Juan Bautista de Muy Muy, luego de varias horas bajo asedio policial

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Despacho 505
  • agosto 16, 2024
  • 09:54 AM

El padre Danny García, párraco de la Iglesia San Juan Bautista del municipio de Muy Muy, que pertenece a la Diócesis de Matagalpa, ha sido detenido por policías que se lo llevaron con rumbo desconocido, confirman feligreses que desde la noche del jueves reportaban asedio en el templo. 

El secuestro del padre García se enmarca en la nueva ola represiva de la dictadura contra la Iglesia católica que en las últimas dos semanas ha resultado en la detención de más de una docena de sacerdotes en el norte de Nicaragua con  el claro objetivo de desmatelar la Diócesis de Matagalpa y la Diócesis de Estelí, ambas dirigidas por obispo desterrado Rolando Álvarez.  

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Con el arresto del párroco de Muy Muy ya son 16 los religiosos que han sido sustraido de sus templos por la Policía, de este grupo siete fueron desterrados a Roma tras un acuerdo con el Vaticano.  

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) expresó este miércoles su preocupación por la "persistente represión" en Nicaragua y en particular por la "persecución religiosa" manifestada en las detenciones "arbitrarias" y las "graves" condiciones en la que permanecen quienes están en prisión.

En su declaración, la CIDH afirmó que entre el 1 y el 10 de agosto pasado, a través del Mecanismo Especial de Seguimiento para Nicaragua (Meseni), recibió información sobre el despliegue de operativos y allanamientos realizados por la Policía sandinista en distintas casas curales y propiedades de la Iglesia católica nicaragüense.

Como resultado de esos operativos, 12 sacerdotes y al menos dos colaboradoras de la Iglesia católica fueron detenidas, la mayoría vinculadas con las Diócesis de Matagalpa o de Estelí, que dirige el obispo excarcelado y desnacionalizado Rolando Álvarez.

Una fuente cercana a la Iglesia del norte, dijo a DESPACHO 505 que la "persecución paranóica" de la dictadura es motivada por la sospecha de que el obispo Álvarez, que fue desterrado a Roma, esté en comunicación con los sacerdotes que prestan servicio en las parroquias que pertenecen a las diócesis bajo su responsabilidad.

Cercano a la feligresía

Desde su formación en el seminario, el sacerdote Danny García se caracterizó por ser muy cercano a las comunidades rurales y a los feligreses que llegaban en busca de una palabra de esperanza. Fue ordenado sacerdote por monseñor Rolando Álvarez, el 16 de noviembre de 2016.

“Mi vocación de sacerdocio nació cuando estaba en un retiro espiritual, mientras estaba en cuarto año de secundaria y ahí me encontré con el Señor, lo puedo afirmar y el Señor me enseñó los valores del evangelio que son totalmente distintos los que iba aprendiendo cuando estaba estudiando”, expresó García en una entrevista realizada por la Diócesis de Matagalpa tres días antes de su ordenación.

“Siempre fue un sacerdote cercano a la feligresía. Lo ibas a ver que nunca se negaba a confesar ni a administrar los santos óleos a las personas que estaban en lecho de muerte”, comparte a DESPACHO 505 una amistad cercana al cura.

En el municipio de Muy Muy, en el departamento de Matagalpa, el sacerdote era el coordinador de los medios católicos y parroquiales de su municipio, en donde estaba pendiente de las transmisiones eucarísticas y de la divulgación de las actividades pastorales de monseñor Rolando en esa localidad.

“Siempre lo ibas a ver apoyando a los jóvenes de la pastoral juvenil. Siempre visitaba las comunidades y bendecía las casas de sus feligreses. Varias veces llevó el Santísimo a las casas para orar por las familias”, contó la amiga del cura.

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El sacerdote tiene como ejemplo pastoral a San Isidro Labrador, un campesino europeo elevado a santo por la Iglesia Católica por su amor y entrega al servicio de Dios.

Reportan 870 agresiones contra la Iglesia desde 2018

Desde abril de 2018 hasta julio de 2024, la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo ha perpetrado 870 ataques contra de la Iglesia católica de Nicaragua. El dato dimensiona la gravedad de la persecución religiosa en el país que, de manera particular se ha enseñado en la institución católica, y fue revelado en la quinta edición del informe “Nicaragua: ¿Una Iglesia Perseguida?”, elaborado por la abogada e investigadora Martha Patricia Molina.

La actualización de la sistematización de la cruzada sandinista contra la fe, que inició en el contexto de las protestas ciudadanas de 2028 que se extendieron en todo el país para exigir la salida de los Ortega Murillo del poder, fue presentado este jueves 15 de agosto, día en que la Iglesia católica celebra el dogma de la Asunción de María.

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Entre los datos más graves de lo que ocurra fronteras adentro con la Iglesia de Roma, la investigadora reporta el exilio de al  menos 245 sacerdotes y una escalada de la persecución religiosa. Entre enero y julio de 2024, la investigadora ha logrado documentar 92 “hostilidades en contra de la Iglesia Católica de Nicaragua”.

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