La producción de perecederos aumenta, pero siguen siendo caros en los mercados

El Sistema Nacional de Producción, Consumo y Comercio informó a finales de junio que la producción de hortalizas ha aumentado y que cuentan con volúmenes suficientes para abastecer los mercados nacionales; sin embargo, los precios de estos productos se elevan constantemente, según han indicado los comerciantes.

Doña Rosa, lleva 25 años en el comercio de verduras en una comunidad del departamento de Rivas, desde que inició el negocio en su casa, viaja hasta el mercado Ernesto Fernández de Masaya para adquirir sus productos, porque dice que es más barato. Pero en los últimos años regresa a su casa cada vez más decepcionada de lo caro que está todo, “ya ni para el pasaje me da”, se queja.

Los comerciantes en los mercados de Managua, también se quejan de como una docena de tomates ha llegado a costar hasta 80 córdobas, lo que contradice lo dicho por las autoridades estatales, que a finales de junio detallaron que esta hortaliza había tenido una producción de 95,057 quintales, “volúmenes suficientes para abastecer consumo mensual”.

“Siempre los precios han estado caros ahora, no han bajado casi, medio bajaron y volvieron a subir. El tomate, el repollo, todo está caro. El tomate lo compré a más de 300 córdobas (medio cubo), casi a 1,500 córdobas la cajilla, dos cubos lleva la cajilla. Los estoy dando a cinco pesos, tres por veinte y a cuatro por veinte los más chiquitos para ganarle”, explica doña Rosa.

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¿Por qué están caros los perecederos?

La comerciante no sabe con exactitud a qué se debe el aumento en el precio de las verduras, por sus años de experiencia en el negocio, cree que en parte puede ser por las lluvias que tienden a dañar a estos productos perecederos. “Poca cosecha tal vez, cebolla no había entrado de afuera, ¿quién sabe porqué está caro todo?”, agrega.

Precisamente sobre la cebolla, el Sistema Nacional de Producción, Consumo y Comercio aseguró tener “suficiente producto en almacén para el mes de Junio y Julio”; no obstante, doña Rosa expone que siempre a ingresado al país un tipo de cebolla amarilla con la que se cubre una buena parte de la demanda nacional y que en las últimas semanas esta hortaliza importada no se ve en en los mercados.

“Cebolla parece que no ha entrado, en el mercado me dijeron que no había entrado de afuera, solo estaban con la nacional”, asegura la comerciante que tuvo que comprar la libra de esta hortaliza en 30 córdobas y que para tener un poco de ganancia debe venderla en 40 córdobas en su pequeño negocio.

La chiltoma es otro producto perecedero que ha subido de precio, una chiltoma se llega a cotizar hasta en 16 córdobas en algunos supermercados del país, en los mercados el precio varía en dependencia de la cantidad que se compre. Doña Rosa expone que en el mercado de Masaya un cuarto de cubo cuesta 100 córdobas, y que en su negocio debe venderlas en 10, 8 y 5 córdobas por unidad en dependencia del tamaño.

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Este es otro de los productos de consumo nacional que muestra el contraste que hay entre lo dicho por las autoridades gubernamentales y la realidad que se vive en cada hogar. En el informe de junio, el Sistema Nacional de Producción, Consumo y Comercio registró una producción de 38,536 quintales de chiltoma, y también aseguró que había “producto suficiente para abastecer demandas”.

Indispensables para el consumo

El tomate, la cebolla, chiltoma, papas y repollo, forman parte de los 23 productos alimenticios de la canasta básica, y todos han subido de precio. La libra de papas cuesta entre 50 y 55 córdobas en los mercados, y el repollo se cotiza entre 50 y hasta 60 córdobas la unidad. La situación se agudiza en la medida de la distancia y disponibilidad de producto en cada departamento.

Managua, siendo capital, es uno de los principales centros de comercio del país y por tanto, los precios de algunos productos pueden estar un poco más baratos que en otros departamentos del país.

“En el mercado de Rivas está caro, las cebollitas tres por 20 pesos, los tomates como cuatro por 20 y un tomatito malón, no muy bueno”, explica doña Rosa, quien siempre ha preferido viajar hasta Masaya para adquirir sus productos, pues considera que hay mejores precios, aunque sea más largo.

De acuerdo a los datos de la canasta básica de mayo, las familias nicaragüenses destinaron 1,438.04 córdobas tan solo para comparar las cantidades establecidas de estos cinco perecederos, cuyos precios por libra se elevaron en comparación con el mes anterior.