Policías y CPC´s asedian a familiares de sacerdotes exiliados

La persecución de la dictadura no cesa en Nicaragua. Familiares de sacerdores en el exilio son las más recientes víctimas de hostigamiento y vigilancia permanente por parte de la Policía y miembros de los llamados Consejos del Poder Ciudadano, denunció la abogada e investigadora Martha Patricia Molina. 

“Varios familiares de sacerdotes exiliados me han expresado que están viviendo un calvario por el asedio y vigilancia permanente de policías y CPCs”, alertó la abogada este martes.

Molina, autora de la investigación “Nicaragua: ¿una iglesia perseguida?” que documenta los ataques de la dictadura a la Iglesia católica y a la libertad religiosa en Nicaragua, explicó a DESPACHO 505 que las patrullas policiales llegan a estacionarse frente a las casas de familiares de religiosos que se encuentran en el exilio cuya identidad se reserva por razones de seguridad.

“También los CPC del barrio se encargan de preguntar sobre el paradero de los religiosos, si están enviando dinero y que cuánto envían, con qué frecuencia llaman y si tienen planes de regresar”, agregó Molina.

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Sacerdotes mantienen planes de exiliarse

El pasado 10 de junio, Molina reportó el exilio de otro sacerdote nicaragüense y aseguró que hay otros que están valorando hacer lo mismo ante el hostigamiento que sufren de parte de operadores de la dictadura.  

Además del asedio a sacerdotes y a sus familiares, también se han visto fotografías en las que policías “acompañan” al obispo de León, René Sándigo, cercano a la dictadura, e incluso al mismo cardenal Leopoldo Brenes. Según Molina es para “vigilarlos”.

“No creo que sea para cuidarlos, ¿de quién?, ¿de qué?, si los asesinos y quienes vulneran derechos humanos y asedian a la iglesia son los mismos policías. Yo creo que es para vigilarlos a ellos pero sobre todo a las personas que se le acercan”, sostiene la abogada.

Nicaragua afronta una grave crisis de libertad religiosa marcada por una implacable persecución a la Iglesia católica. Ante esta situación, la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB, por sus siglas en inglés), expresó el pasado 20 de julio, que la dictadura Ortega-Murillo pretende crear una “iglesia paralela” y la intimidación de líderes religiosos para que se sometan, favoreciendo a aquellos más dispuestos a adularlos.