Denuncian por difamación al padre del tico que asesinó a balazos a nicaragüense en Costa Rica

La familia del nicaragüense Otoniel Orozco Mendoza, asesinado de 14 balazos por su vecino Eduardo Ramírez Zamora en un condominio de Escazú, en Costa Rica, denunció al papá del atacante por el delito de “ofensa a la memoria de un difunto”.

“Con indignación y dolor, la esposa del señor Otoniel Orozco se presentó al Juzgado Contravencional de Escazú a presentar denuncia formal en contra del padre del sujeto que asesinó a mansalva a su esposo, por las aseveraciones muy graves que hace el señor padre Eduardo Ramírez, con relación a la situación que está en investigación judicial”, dijo José Francisco Ayala, abogado del de la familia del nicaragüense.

Otoniel Orozco Mendoza, de 54 años, quien era un empresario, estaba casado y nacionalizado en Costa Rica, situación que era objeto de burlas y ofensas de parte de Eduardo Ramírez, su vecino. El crimen quedó grabado en cámaras de seguridad del condominio.

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“Para la familia ha sido sumamente dolorosa esta situación. La información que se está dando a saber a otros medios y el manejo de esa información porque siguen siendo la familia del señor Otoniel, es la que se ve afectada, la que se ve señalada y la que en este caso se está difamando”, explicó el abogado.

El representante de la familia nicaragüense no explica qué tipo de difamaciones está recibiendo la familia.

Difamación podría estar relacionada a xenofobia

El abogado llamó al padre del acusado a que se presente a los tribunales de Escazú para poner fin a los extensos conflictos que acabaron en el asesinato de Otoniel.

Las supuestas difamaciones que sufre la familia de Orozco podrían estar relacionadas a la xenofobia.

“No está dentro de nuestro control, las acusaciones, la difamación y el odio, la práctica de xenofobia que sigue manteniendo esta familia en contra de nuestros representados”, comentó el abogado.

A Eduardo Ramírez Zamora le dictaron tres meses de prisión preventiva mientras continúan las investigaciones del caso.

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La Fiscalía tica desde ya ha solicitado la pena máxima de 35 años de prisión contra el acusado por el delito de homicidio agravado.