Mulas, caballos y millones de dólares, las dudosas operaciones de la Policía contra el narcotráfico

Habían pasado dos años y tres meses desde la última vez que la Policía del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo reportó una incautación millonaria al narcotráfico en la que los únicos detenidos fueron caballos o mulas, como ocurrió este lunes en una localidad del municipio El Castillo, del departamento de Río San Juan.

El operativo llevó a la recuperación de un botín de 1.5 millones de dólares que un hombre que se dio a la fuga llevaba a lomo de dos mulas, de las que el parte policial no señala si se encuentran detenidas como evidencia del hallazgo, igual que en un "golpe" al  crimen organizado reportado hace dos años con la detención de dos caballos con un millonario botín a cuestas.

Ese caso, ocurrido en febrero de 2022, fue por cierto uno de los golpes más contundentes --según los mismos medios oficialistas-- que las autoridades del régimen dieron al crimen organizado al incautar 2 millones 929 mil 100 dólares en Las Tablillas, una comarca alejada ubicada en la frontera sur, muy cerca a Costa Rica.

El parte policial de esa acción decía que la operación incluyó un tiroteo que no dejó heridos ni muertos ni de un bando ni del otro. 

Celebraron también que los caballos detenidos como evidencia se encontraban en buena condición y, claro, los dos sacos en los que los hombres llevaban el dinero tampoco sufrieron daño alguno. Dijeron que se recuperó hasta el último dólar ilegalmente transportado.

Un montado en mula muy habilidoso

En la comarca de Santa Cruz en Boca de Sábalos, Río San Juan, lugar donde según el jefe de la Dirección de Auxilio Judicial, comisionado General Victoriano Ruiz Urbina, se realizó el operativo, todavía se preguntan cómo le hizo el  hombre que guiaba a las mulas para escapar de las autoridades.

“No sabemos si huyó en la mula que montaba o corriendo”, dice un poblador de la zona, bastante interesado en el dato.

Don Aníbal es un somoteño que utiliza para el trabajo de su huerta burros y mulas. Dice que los prefiere porque “son mejores animales de carga” que los caballos y, por alguna razón, cree que se enferman menos.  “Por eso yo digo que son como más baratos”, comenta a DESPACHO 505.

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Si alguien está autorizado para hablar sobre burros y mulas en el país es un somoteño. En esta ciudad, cada año hasta organizan un festival para celebrar a estos animales y, aunque pocos hablan de mulas, igual las montan durante la festividad en las que recorren la ciudad durante todo el día, el que suele ser a mediados de cada año.

Don Aníbal dice que supo del operativo policial y, definitivamente, descarta que el hombre que transportaba el dinero haya podido escapar sobre la mula. “Es un animal muy lento”, explica. “Patas pequeñas, pesada porque son de carga, no son de velocidad”, analiza muy en serio.

El campesino agrega que en años anteriores en los festivales de Somoto se organizaron carreras de burros y mulas y estos animales llegan alcanzar velocidades de entre 24 y 31 kilómetros por hora, pero que difícilmente pueden sostener ese ritmo en un trayecto de más de un kilómetro.

“Es imposible que la persona de quien hablamos haya huido en mula”, dice. “Además la Policía anda en patrullas y motos ¿no?”, se preguntó pues afirma que en cualquier tipo de vehículo fácilmente lo alcanzarían.

Según el relato del comisionado Ruiz Urbina, el operativo tuvo lugar el jueves pasado a eso de las 9:45 de la noche. Contó que, durante la ejecución del Plan de Seguridad en el Campo, los uniformados vieron al sujeto que montado en una mula halaba a otra bestia que cargaba dos sacos de color rojo.

Agregó que le hicieron la señal de alto y que huyó. “Si le hicieron la señal de alto es que la Policía estaba cerca del sujeto”, dice otro poblador de Santa Cruz. “Lo siguieron y si dejó a la mula, salió corriendo, bien lo agarraban esos policías”, reflexionó.

Mucha plata, poca especie

Un especialista en temas de seguridad dice que la institución policial nicaragüense, desprestigiada desde su papel en 2018 por comandar sangrientas operaciones contra opositores al régimen y violar sistemáticamente los derechos humanos en el país, es criticada por estas frecuentes incautaciones en las que nunca “hay detenidos, ni especie (drogas)”.

“Llama mucho la atención que crecen las fortunas interceptadas, pero están estancadas las incautaciones de drogas, no hay operativos en los que digan esta cantidad se incautó, pero si son miles y miles de dólares los que se hallan. Ahí hay un problema, se crea desconfianza”, comenta, solicitando anonimato debido a la represión de la dictadura.

Dijo que el año 2021, por ejemplo, Nicaragua fue el país de la región que menos aportó para detener el trafico de drogas, pues aunque el régimen insista en proyectar el llamado “Muro de Contención al crimen Organizado y Narcotráfico”, en ese año reportó la incautación de apenas 4.5 toneladas de cocaína, de un total de 250 toneladas que fueron incautadas en la región. Ello mientras Costa Rica y Honduras, sus vecinos, reportaron 70.8 toneladas y 24 toneladas, respectivamente.

Un seguimiento a las incautaciones de dinero realizadas por la Policía revela desde el 2018, el régimen obtuvo 9 millones 305 mil 421 dólares, indica el experto.

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“En ese quinquenio vemos que informan de operativos que cada año incautan 6 millones, 7 millones y hasta 14 millones de dólares en un solo día, pero no hay drogas, ni detenidos”, cuestiona.

El año pasado la suerte de la institución no pudo ser diferente a la de los años anteriores. Hasta agosto por ejemplo, incautaciones similares llegaron a los 13 millones 764 mil 996 dólares, manteniendo el mismo patrón: falta de detenidos y drogas, aunque al menos sin detenciones de caballos y mulas.