Amaru Ruiz: La cancelación del proyecto Bio-Clima es un reconocimiento a la resistencia indígena

El 7 de marzo el Fondo Verde para el Clima resolvió anular el acuerdo del proyecto Bio-Clima que había firmado con Nicaragua. La decisión puso fin a un largo proceso que inició con la denuncia del liderazgo de lo pueblos indígenas y afrodescendientes que vieron en este una amenaza. La resolución, dice Amaru Ruiz, presidente de Fundación del Río, marca un precedente y tiene varias lecturas de fondo. Él considera como la más importante el reconocimiento a la resistencia de las comunidades indígenas y afrodescendientes en la defensa de su territorio.

Para la dictadura de Daniel Ortega, Ruiz cree que representa una lección mayúscula y es que no pueden ni deben continuar violando los derechos de esos pueblos y que de continuar tendrá consecuencias. En este caso, por ejemplo, ha perdido un financiamiento de más de 116.6 millones de dólares.

La investigación realizada por el Mecanismo de Reparación Independiente (IMR por sus siglas en inglés) demostró que hubo violaciones a los principios y políticas del Fondo Verde del Clima y a las salvaguardas ambientales y sociales por parte de Nicaragua, algo que como ente ejecutor debió cumplir en la etapa de elaboración del proyecto

De acuerdo con Ruiz, quedó en evidencia que el Estado nicaragüense incumplió con las políticas y salvaguardas y que a pesar de que se le dio un plazo de 120 días para corregir y que tratara de cumplir “lo que presentó en octubre de 2023 fue una simulación de los procesos de consulta que debieron de ser previos a la aprobación del proyecto".

"UN LLAMADO DE ATENCIÓN A LA DICTADURA"

Ruiz remarca que la cancelación del acuerdo es un serio llamado a la dictadura Ortega-Murillo a frenar las violaciones a los derechos de las comunidades indígenas del Caribe de Nicaragua.

"Esta acción demuestra que existen mecanismos serios e independientes que pueden seguir incidiendo para que el régimen cumpla con sus compromisos ambientales y sociales de protección a estas comunidades y a estos territorios, y si no lo hace va a tener consecuencias", añade Ruiz.

Con la propuesta del proyecto Bio-Clima la dictadura proponía combatir el cambio climático, a través de la producción agroecológica en la Reserva de Bosawás y el Río San Juan. Sin embargo, no contaba con la consulta de las comunidades indígenas y afrodescendientes que, de manera oportuna, denunciaron las irregularidades y señalaron los riesgos a los que ese proyecto los enfrentaba.

FONDOS DE BIO-CLIMA NO REPRESENTAN PÉRDIDAS AL PAÍS

Según Ruiz, la cancelación del financiamiento del FVC no debe verse ni como una victoria política ni como una pérdida para el representa una pérdida para el país. Insiste en que es una demostración clara de que existen instancias y mecanismos a los que se puede recurrir e incidir. En este caso, destacó el trabajo del liderazgo de los pueblos originarios así como el rol asumido por la sociedad civil.

"No puede representar una pérdida para el país si, al final, estos recursos son administrados de forma poco transparente", destacó Ruiz tras señalar ha quedado en evidencia la ineficiencia de la dictadura.

El presidente de Fundación del Río, agrega que quedó fundado que la administración orteguista encamina al país a una catástrofe ambiental.

En su resolución, la Secretaría del Fondo Verde para el Clima aclaró que “sigue comprometida a defender el principio de no causar daño y evitar, minimizar y mitigar los posibles impactos ambientales y sociales adversos de las actividades de financiación climática".