El nuevo embajador de la Unión Europea llega este jueves a Nicaragua

El encargado de negocios de la Unión Europea (UE) en Nicaragua, Uwe Wissenbach,  anunció el fin de su misión diplomática en el país y confirmó la llegada este jueves del nuevo embajador Fernando Ponz Cantó.

El pasado 18 de abril, el régimen de Daniel Ortega había retirado el plácet que había concedido a Ponz Cantó como nuevo embajador en Managua, debido al "injerencista, atrevido e insolente comunicado" divulgado por el organismo sobre la crisis que vive el país desde hace 5 años.

El 14 de julio pasado, el dictador nombró a César Augusto Castañeda Lacayo como su nuevo embajador ante la UE, ocho meses después de que el organismo comunitario expulsara a su anterior representante, Zoila Müller.

El 10 octubre de 2022, la Unión Europea decidió declarar persona "non grata" a Müller en respuesta "recíproca" a la expulsión de la embajadora comunitaria en Managua, Bettina Muscheidt.

MÁS NOTICIAS | Políticos, universitarios, catedráticos y exalumnos condenan la confiscación de la UCA

La noticia de la expulsión de la embajadora europea en Managua se dio después de que la delegación de la UE ante la ONU exhortara a Ortega a "devolver la soberanía de Nicaragua al pueblo nicaragüense" y a "restaurar la democracia" en el país.

APELAN AL DIÁLOGO PARA SALIR DE LA CRISIS

En su mensaje de despedida, el Encargado de Negocios, Uwe Wissenbach, dijo creer en el camino del diálogo para la búsqueda del entendimiento y la reconciliación en Nicaragua.

"Creemos en el camino del diálogo para la búsqueda del entendimiento y la reconciliación, también en la protección de las minorías y de las culturas indígenas, para seguir construyendo y mejorando nuestro proyecto de paz, democracia y prosperidad sostenible en una relación respetuosa con la Madre Tierra", indicó.

El diplomático aseguró que se despide de Nicaragua "luego de 4 años intensos, llenos de conversaciones, emociones, amistades y recuerdos inolvidables" y "convencido de que la UE es un socio importante para las y los nicaragüenses".

"Más allá de la cooperación solidaria y los lazos culturales que nos unen con este bello país, europeos y europeas también podemos compartir diversas experiencias de convivencia pacífica y democrática después de un largo período de guerras, genocidios y dictaduras en Europa", apuntó.

Sostuvo que los valores que la Unión Europea promueve "en todo el mundo son fruto de una historia amarga vivida en carne propia".

EL CASO DEL OBISPO ROLANDO ÁLVAREZ

A mediados de septiembre pasado, también el Parlamento Europeo aprobó por mayoría una resolución sobre la situación de Nicaragua, "en particular la detención del obispo Rolando Álvarez", en la que -entre otras cosas- exigió la liberación inmediata del líder religioso y de todos los "presos políticos".

Cinco meses después, el 10 de febrero pasado, las autoridades judiciales de Nicaragua, controlada por los sandinistas, condenó al obispo Álvarez a más de 26 años de prisión por "traición a la patria" y se encuentra recluido en una cárcel de máxima seguridad en las afueras de Managua.

Las relaciones entre Nicaragua y la UE se han mantenido tensas en los últimos cinco años debido a sanciones establecidas por Europa a familiares y allegados del presidente Ortega, así como a funcionarios e instituciones del Gobierno, por señalamientos de violaciones a los derechos humanos.