Cuatro nuevos testigos declararán ante el juez por el femicidio de nicaragüense en España
El juez autorizó el traslado del cuerpo de la nicaragüense para su vela y posterior repatriación. La recaudación de fondos continúa.
El próximo 16 de agosto está previsto que declare una mujer identificada como Marina y la recepcionista del hostal donde se escondió el sospechoso del femicidio de la nicaragüense Erica Vanessa Reyes Álvarez, de 22 años, asesinada el 31 de julio en Utrera, España.
Estas dos personas forman parte de un grupo de cuatro testigos que el juez de Instrucción número 2 de Utrera, España, citó a declarar por el crimen de la nicaragüense presuntamente asesinada por su pareja, quien fue capturado por la policía española horas después del crimen.
El Diario de Sevilla informó que los otros dos testigos declararán el 17 de agosto. Las personas fueron identificadas como Sandra y Rosa, vecinas de la pareja. La hermana de Erica y su pareja ya declararon.
“Este hombre relató al juez que el marido acosaba a Erica con continuas llamadas de teléfonos. Este acoso se incrementó cuando supo que ella había iniciado una nueva relación”, cita el medio español.
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El sospechoso del femicidio fue identificado como Ángel C. T., de 43 años, y de nacionalidad ecuatoriana. El hombre está bajo detención provisional y se acogió a su derecho a no prestar declaración ante el juez. Cuando fue capturado por la Guardia Civil negó ser el autor del crimen y no ha colaborado en las investigaciones.
PREPARAN REPATRIACIÓN DEL CUERPO
Por otro lado, el juez autorizó que la familia pueda trasladar el cuerpo al tanatorio para su vela y a realizar los trámites para la repatriación prevista para las próximas semanas.
La nicaragüense era originaria de Talolinga, Nueva Guinea y la acusación particular del caso la lleva el abogado José Antonio Sires, en representación de la familia de la mujer asesinada.
La Asociación Nicaragüense Sevilla-España ha recaudado más de 4 mil euros de una meta de 6 mil para repatriar el cuerpo de la joven. La organización agradeció el apoyo que brindan instituciones de Utrera y a todas las personas que han manifestado su solidaridad por la tragedia de la nicaragüense.
“Las cuentas siguen habilitadas para poder llegar a la meta final y toda ayuda sigue siendo bienvenida”, indica la Asociación.
Erica no tenía hijos menores de edad y no había denunciado a su agresor por malos tratos, fue encontrada sin vida el lunes 31 de julio en su domicilio con un fuerte golpe en la cabeza.
La autopsia reveló que falleció como consecuencia de los golpes que recibió en la cabeza con un objeto contundente tipo martillo, que aún no ha sido localizado.
La joven vivía junto a su hermana y una persona más en una casa de acogida para ciudadanos de Nicaragua que decidieron en 2018 exiliarse por la represión que ejerce el régimen de Daniel Ortega.
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