Cristiana Chamorro es la figura pública mejor evaluada, revela encuesta de CID Gallup
Los dictadores Daniel Ortega y Rosario Murillo son los menos valorados por los nicaragüenses
- enero 25, 2023
- 08:42 AM
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Cristiana Chamorro es la figura pública más valorada entre los nicaragüenses en la última encuesta de CID Gallup, a pesar de permanecer casi 20 meses de encierro, al que la ha sometido por el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
Chamorro que fue encarcelada el pasado 2 de junio de 2021, después de que expresara su deseo de ser candidata presidencial en las fallidas elecciones generales del ese mismo año, no ha mermado su popularidad.
La encuesta número 104 que CID Gallup realiza en Nicaragua, desde 1989, fue desarrollada entre el 3 y el 16 de enero de este año, en la que entrevistó a 1,204 adultos de 16 años de edad y más, con teléfono celular activo, en todo el país. El sondeo tiene un nivel de confianza del 95 por ciento en sus resultados totales.
En el apartado de la situación política en Nicaragua, se abordó la opinión pública sobre las figuras públicas y la mejor posicionada fue Cristiana Chamorro.
El porcentaje de Chamorro es 36 por ciento favorable y 21 por ciento desfavorable, para un índice de + 15.
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En porcentaje favorable le siguieron los dictadores Daniel Ortega y Rosario Murillo, con 35 y 34 por ciento respectivamente, sin embargo, el porcentaje desfavorable también fue alto para cada uno de ellos, con 49 por ciento para Ortega y 46 por ciento para Murillo. De esa forma, Ortega obtuvo un índice de -14 y Murillo de -12, los peor calificados.
PRESOS POLÍTICOS BIEN VALORADOS
Otros personajes con buen índice de popularidad fueron los también prisioneros políticos Juan Sebastián Chamorro (+8) y Medardo Mairena (+7). Entre ellos se colocó la alcaldesa designada para Managua, Reyna Rueda.
Las figuras afines a la dictadura fueron, en general, los peor calificados, como el hijo de los dictadores, Laureano Ortega (-9), el general en retiro Omar Halleslevens (-3) y el actual presidente de la Asamblea Nacional, Gustavo Porras (-1).
La medición se centró en el actuar de las figuras públicas entre 2018 y el presente.
La calificación de Laureano Ortega es significativa porque, según CID Gallup, algunos informantes indicaron que era “el escogido para sustituir a Ortega en su retiro”.
RECHAZO A LOS PARTIDOS POLÍTICOS
Según la encuesta, pocos nicaragüenses tienen en este momento un partido de preferencia. CID Gallup advierte que esto es común en épocas no electorales.
El 70 por ciento de los encuestados dijo no tener preferencia por ningún partido político.
“Hacen lo que quieren”, “¿para qué opinar en política?”, “en todo caso, todos son los mismos”, “no tengo elección” y “tengo miedo hablar después de lo que sucedió el 18 de abril (de 2018)”, son algunas de las excusas que los encuestados adujeron a CID Gallup para no emitir preferencia por un partido político.
Aún así, el partido Frente Sandinista (FSLN) es el preferido de un 22 por ciento de los encuestados, seguido por Ciudadanos por la Libertad (CxL), con dos por ciento y Partido Liberal Independiente (PLI), igualmente con el dos por ciento de preferencia.
DESCONTENTO POR EL MANOSEO DE LA DEMOCRACIA
El sondeo revela que en este momento el tema de la democracia le es indiferente a la población nicaragüense, explica CID Gallup.
Al ser consultados por la importancia de la democracia, los encuestados respondieron con frases como “al final las instituciones del gobierno hacen lo que quieren y no nos toman en cuenta”, “aquí en nuestro país, nunca se ha visto democracia”, “ellos hacen las leyes a su conveniencia”, “él y su familia hacen lo que quieren”, “la misma familia es la que maneja los cargos más importantes”, “son los que controlan el país”.
A pesar de ello, algunos entrevistados sí señalaron al régimen Ortega Murillo como un gobierno autoritario y se quejaron de los ataques a la iglesia católica y la falta de libertad en las calles.
La queja la expresaron a través de hechos como la “prohibición de las actividades religiosas de la iglesia católica”, el “no aceptar aglomeración o grupos que quieran hacer manifestaciones en la calle” y que “manifestarse en la calle se considera ya un delito”.