Padre del niño devorado por un cocodrilo en Costa Rica duda que alguien diga quién sacrificó al animal
Las autoridades ambientales de Costa Rica buscar identificar y sancionar a las personas que dieron muerte al cocodrilo
- noviembre 30, 2022
- 08:41 AM
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En el cantón de Matina, provincia de Limón, las autoridades ambientales de Costa Rica investigan el sacrificio de un cocodrilo, ocurrida el pasado 26 de noviembre, en el río Matina, pero la población no está dispuesta a brindarles información.
Al animal lo mataron porque supusieron, por su gran tamaño, que era el mismo que 27 días antes había devorado, frente a su madre y sus hermanos, a un niño nicaragüense de 8 años de edad, Julio Otero Fernández.
El padre de la criatura devorada, Julio Rubén Otero, indicó que no han llegado al poblado de Cuatro Millas, donde vive, y aunque las autoridades de Sistema Nacional de Áreas de Conservación (Sinac) de Costa Rica, están investigando, pero en el cantón de Matina nadie quiere hablar.
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"¿Irán a enjuiciar al pueblo entero?, porque la comunidad dice que nadie va a decir nada. Nadie vio nada y eso es todo lo que la gente dice", indicó Otero a DESPACHO 505.
Las autoridades del Sinac podrían pedir penas de uno y hasta tres años de prisión para las personas que sacrificaron al cocodrilo.
El padre del menor devorado por el animal duda de que vayan a enjuiciar a alguien.
"Al no encontrar evidencias, por lo menos las huellas en el río las borró el agua. El río creció y, ahora, ¿Dónde van a levantar huellas? No tenían cámaras puestas en el río. No hay forma de averiguarlo. Pueden tener una sospecha, pero sin prueba tampoco pueden enjuiciar a alguien", manifestó Julio Rubén Otero.
LA MUERTE DEL ANIMAL
Según los lugareños, el cocodrilo medía casi cinco metros de largo y nunca antes había atacado en la zona donde mató al niño Julio Otero Fernández. Pero, los vecinos quedaron alertas, para que no volviera a atacar a otro humano.
El sábado 26 de noviembre pasado, a los padres del niños les llegaron a avisar que un hombre desconocido había encontrado y matado a un cocodrilo grande en el río Matina.
“Hay un animal muerto y se ve demasiado grande, puede ser ese el animal que le quitó la vida a su hijo. Vaya a verlo”, le dijeron a Julio.
Julio fue al río para verificar la noticia y lo que halló fue a un animal descuartizado. “Ya se le habían llevado la cabeza y la cola. Parece que lo cortaron con una motosierra”, explica.
NADIE SABE QUIEN SACRIFICÓ AL COCODRILO
En una bolsa de plástico, los vecinos del lugar metieron dos huesos largos y un manojo de cabellos humanos que fueron encontrados en el estómago del cocodrilo. Nadie supo quién le dio muerte a la bestia de casi cinco metros de largo.
La persona que lo hizo avisó que lo había matado y luego desapareció sin identificarse, explicó un medio local.
Hasta este miércoles 30 de noviembre, las autoridades forenses y policiales de Costa Rica no le habían confirmado a los Otero Fernández si los restos hallados en el animal son los de su hijo o no.
De acuerdo al Sinac, el sacrificio del reptil fue ilegal e infringe el artículo 93 de la Ley de Conservación de la Vida Silvestre, ley 7317, por lo que no descartó iniciar un proceso judicial para condenar a las personas involucradas.
Julio Otero y su esposa Margine Fernández son matagalpinos que llegaron a Costa Rica hace cuatro años en busca de oportunidades económicas, pero ahora conviven con el dolor por la pérdida del cuarto de sus cinco hijos.