La UE consulta con los 27 la “forma y alcance” de su respuesta a la expulsión de su embajadora en Managua

Los 27 Estados miembros de la Unión Europea ya están discutiendo sobre “la forma y alcance” de la reacción “firme y proporcionada” que darán a la dictadura de Daniel Ortega por la expulsión de su embajadora en Nicaragua, confirmó el portavoz de Exteriores, Peter Stano, sin revelar qué posibilidades se contemplan. 

El Servicio de Acción Exterior de la Unión Europea, a cargo del Alto Representante Josep Borrell, prometió el domingo una respuesta “firme y proporcionada”. En conferencia de prensa, el portavoz de Exteriores reafirmó este lunes que “por supuesto”, el gesto de la dictadura “va a afectar a las relaciones entre la Unión Europea y Nicaragua, y entre los miembros de la Unión Europea y Nicaragua”.   

“No solo lamentamos, sino que condenamos esta decisión unilateral y sin justificación” que constituye “un acto hostil que solo llevará a un mayor aislamiento de las autoridades nicaragüenses y su régimen”. 

La expulsión de la embajadora Bettina Muscheidt se concretó el pasado sábado. La dictadura nicaragüense la había declarado persona “non grata” tres días antes.  Esta decisión fue acompañada también por el rompimiento de las relaciones diplomáticas con el Reino de los Países Bajos. 

CONDENA DEL PARLAMENTO EUROPEO  

La presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, se refirió en la apertura de la sesión plenaria en Estrasburgo a la expulsión de la jefa de la delegación de la Unión Europea en Managua. 

Según Metsola, este es un paso más en la “erosión” de la democracia emprendida por el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.   

“El régimen Ortega-Murillo no puede seguir aislando al país de la comunidad internacional”, dijo. Desde el Parlamento Europeo se “mantendrá siempre una postura firme ante la erosión de las estructuras democráticas” y “seguiremos combatiendo la erosión de las estructuras democráticas, comprometidos con un orden basado en normas, en interés del pueblo nicaragüense”. 

LEA TAMBIÉN | Ortega “sofocado por presión internacional” responde con ofensiva diplomática, dicen analistas 

El pasado 15 de septiembre pasado, el Parlamento Europeo aprobó una resolución que condena la escalada de la represión contra la Iglesia católica, figuras de la oposición y de la sociedad civil, defensores de derechos humanos, periodistas, campesinos, estudiantes e indígenas en Nicaragua.  

El Parlamento reiteró su demanda de liberación “inmediata e incondicional” del obispo Rolando Álvarez, arrestado “de forma arbitraria” y de todos los presos políticos en Nicaragua.  

Además, solicitó al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas que se abra una “investigación formal” de Nicaragua y el dictador Daniel Ortega a través de la Corte Penal Internacional por “crímenes contra la humanidad”. Al Consejo de la Unión Europea se la ha pedido la aplicación de nuevas sanciones.