Condenan a 44 años de cárcel a Walner Ruiz Rivera, preso político de Masaya que fue deportado de Costa Rica

Walner Ruiz Rivera, el opositor de Masaya que fue deportado de Costa Rica el 11 de noviembre del año pasado, fue sentenciado a 44 años de cárcel por los supuestos delitos de crimen organizado, asesinato agravado y tráfico internacional de drogas que le imputó la Fiscalía tres meses después de haber vuelto al país.  

La sentencia emitida este martes fue dictada por la jueza orteguista Nancy del Carmen Aguirre Gudiel, del juzgado Décimo del Distrito Penal de Juicio de Managua quien también condenó a  Walner a pagar una multa de 31 mil córdobas. 

El detenido participó en el levantamiento de tranques de Masaya durante las protestas antigubernamentales que estallaron en abril del 2018, junto con los también presos políticos Cristhian David Meneses Machado y Hader Humberto González. 

Por participar en las protestas los tres opositores de Masaya, comenzaron a ser acosados por la Policía a mediados de julio de 2018, luego que la dictadura pusiera fin a las protestas a través la violenta “Operación limpieza”.  

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Aunque no lograron detenerlos, los tres fueron acusados junto a nueve opositores, por diversos delitos, entre ellos el asesinato del teniente de la policía Gabriel Vado Ruiz, ocurrido el 15 de julio del 2018.  

Para ponerse a salvo de la persecución de la dictadura, los opositores se exiliaron en Costa Rica en julio de 2018. 

SU DETENCIÓN

A su regreso al país el año pasado, Walner terminó siendo capturado, procesado y sentenciado a 25 años por el asesinato de dos campesinos, nueve por crimen organizado y 10 años por tráfico internacional de drogas más la multa de 500 días equivalente a 31.000 córdobas.  

Aunque el total de las penas suman 44 años, la jueza explicó que, por mandato constitucional, Walner debería finalizar su condena el 12 de febrero del 2052. 

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En Nicaragua, hay al menos 190 presos políticos, entre los que hay defensores de los derechos humanos, líderes campesinos, estudiantes, empresarios, representantes de la diversidad sexual, intelectuales y periodistas.

Nicaragua vive una crisis sociopolítica que estalló en abril de 2018, con multitudinarias manifestaciones contra Ortega, que fueron reducidas con ataques armados que, según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), dejó al menos 355 muertos en el primer año, de los cuales el mandatario admitió 200 y alegó que se defendía de un supuesto golpe de Estado.