Joe Biden es ya el presidente de Estados Unidos: "La democracia ganó"

La mayoría de los invitados a la ceremonia son legisladores estadounidenses, aunque también están los expresidentes Barack Obama (2009-2017), George W. Bush (2001-2009) y Bill Clinton (1993-2001), junto a sus respectivas esposas, Michelle Obama, Laura Bush y Hillary Clinton.

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  • enero 20, 2021
  • 04:50 AM

El demócrata Joe Biden ha sido investido como el presidente número 46 de Estados Unidos. La ceremonia comenzó este miércoles en un acto frente al Capitolio en Washington DC, en medio de estrictas medidas de seguridad.

A las 11.18 de la mañana, mientras caían unos pocos copos de nieve, Biden y su esposa, Jill, bajaron la escalinata oeste que sale del Capitolio y se dirigieron a sus asientos para el comienzo de la investidura.

Poco antes, Harris y su esposo, Doug Emhoff, habían llegado también a lugar de la ceremonia, donde los esperaban unos 1.000 invitados, muchos menos que los 200.000 que solían ocupar los asientos de honor durante ceremonias previas en las que no había pandemia ni desafíos tan graves de seguridad.

La ceremonia comenzó con un discurso de la senadora demócrata Amy Klobuchar, una de las rivales de Biden en las primarias demócratas del año pasado, quien recordó el asalto al Capitolio de hace dos semanas y pidió "no dar por sentada la democracia" estadounidense.

"Este es el día en el que nuestra democracia se pone en pie, se sacude el polvo y hace lo que siempre ha hecho", afirmó Klobuchar.

La mayoría de los invitados a la ceremonia son legisladores estadounidenses, aunque también están los expresidentes Barack Obama (2009-2017), George W. Bush (2001-2009) y Bill Clinton (1993-2001), junto a sus respectivas esposas, Michelle Obama, Laura Bush y Hillary Clinton.

El vicepresidente saliente, Mike Pence, asiste también a la ceremonia, al contrario que Donald Trump, quien es el primer mandatario en 152 años que no participa en la investidura de su sucesor y que ya está en su estado de residencia, Florida.

La ceremonia cuenta con el mayor despliegue de seguridad de cualquier investidura presidencial en la historia del país, bajo la atenta mirada de hasta 25.000 militares de la Guardia Nacional, cinco veces más que los que hay en Irak y Afganistán.

Además, la jornada contrasta con otras investiduras por la ausencia de público en el National Mall, la enorme explanada que se extiende desde el Capitolio hasta el monumento a Lincoln.

Para representar a los estadounidenses que, de no haber sido por la pandemia, se habrían desplazado a Washington para ver la investidura, los organizadores han dispuesto a lo largo de esa explanada 191.500 banderas de diferentes tamaños y tipos, iluminadas por 56 pilares de luz que representan a los estados y territorios del país.

JURAMENTACIÓN

A las 11.50 hora local (16.50 GMT), Biden comenzó el juramento con el que se compromete a "preservar, proteger y defender la Constitución de Estados Unidos".

"Así que Dios, ayúdame", exclamó Biden al término del juramento.

Biden juró el cargo sobre la misma Biblia que ha utilizado con ese fin durante toda su carrera política: un enorme tomo que es propiedad de su familia desde 1893 y que mide casi 13 centímetros de ancho (5 pulgadas).

El presidente electo se apoyó por última vez en esa Biblia para jurar en 2013 su segundo mandato como vicepresidente estadounidense, cargo que ejerció entre 2009 y 2017 con Barack Obama como presidente.

Obama presenció a pocos metros de distancia el juramento del que fuera su mano derecha en la Casa Blanca.

El juramento del cargo fue tomado por el juez John Roberts, presidente de la Corte Suprema de Estados Unidos.

La investidura se celebra con un público reducido debido a los protocolos para evitar los contagios por covid-19, y un dispositivo de seguridad sin precedentes en la historia del país, con hasta 25.000 militares desplegados en Washington.

La ciudad está en máxima alerta desde que el pasado 6 de enero cientos de seguidores radicales del presidente saliente de EE.UU., Donald Trump, asaltaran el Capitolio, un suceso que conmocionó al país y que arrebató la vida a cinco personas, incluido un policía.

Rompiendo con la tradición, Trump no asistió al acto de investidura de su sucesor y puso rumbo a su mansión privada en Palm Beach (Florida), estado donde llegó poco antes del inicio de la ceremonia.

El vicepresidente saliente, Mike Pence, sí asistió al acto, a la que también acudieron la mayoría de los legisladores estadounidenses y anteriores mandatarios, como George W. Bush (2001-2009) y Bill Clinton (1993-2001), junto a sus respectivas esposas, Laura Bush y Hillary Clinton.

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