Nicaragua en alerta por viruela del mono, te contamos cómo se transmite

El Ministerio de Salud de Nicaragua activó la vigilancia epidemiológica ante la declaración de emergencia sanitaria internacional por la viruela símica o viruela del mono. Te explicamos qué es, cuáles son los síntomas y cómo se transmite.

Según el Minsa, la vigilancia epidemiológica permitirá detectar oportunamente casos sospechosos, de acuerdo a los síntomas y antecedentes de viaje.

La nueva variante de la viruela del mono es más agresiva, advierte la Organización Mundial de la Salud (OMS). Esto conllevó a una segunda emergencia sanitaria internacional después de la de 2022 que acabó en 2023. 

El actual brote de mpox (conocido antes como viruela del mono) se originó en la República Democrática del Congo y se ha extendido a otros países cercanos. En Europa ya se reportan casos.  

La OMS afirma que esta vez los brotes no son consecuencia de la circulación de una misma variante del virus, sino de más de una, y que también se han observado niveles de riesgo y de contagio diferentes, mientras que hace dos años la transmisión era casi exclusivamente por vía sexual. 

¿Qué es la mpox o viruela del mono? 

Es una zoonosis viral causada por el virus de la viruela símica, este incluye al virus variola (causante de la viruela). La viruela símica o viruela del mono se caracteriza por erupción o lesiones cutáneas que suelen concentrarse en la cara, las palmas de las manos y las plantas de los pies. 

MÁS NOTICIAS | Organismos sanitarios piden más medidas de control tras el primer caso de viruela de mono en Europa

Las infecciones humanas con la cepa de África occidental parecen causar una enfermedad menos grave en comparación con la cepa de la cuenca del Congo, que es por la que se decretó esta alerta sanitaria internacional.  

¿Cómo se transmite la viruela del mono? 

La mpox tradicionalmente se transmite principalmente por contacto directo o indirecto con sangre, fluidos corporales, las lesiones de la piel o las mucosas de animales infectados. 

La transmisión secundaria o de persona a persona puede producirse por contacto estrecho con secreciones infectadas de las vías respiratorias o lesiones cutáneas de una persona infectada, o con objetos contaminados recientemente con los fluidos del paciente o materiales de la lesión. La transmisión se produce principalmente por gotículas respiratorias.  

La infección se transmite asimismo por inoculación o a través de la placenta (viruela símica congénita).  

“No hay evidencia que el virus de la mpox se trasmita por vía sexual”, dice la OMS.  

El tratamiento para la viruela del mono 

No hay tratamientos específicos contra la infección. Los síntomas de la viruela símica se suelen resolver espontáneamente.

La atención clínica de la viruela del mono debe optimizarse al máximo para aliviar los síntomas, gestionar las complicaciones y prevenir las secuelas a largo plazo. 

Es importante cuidar la erupción dejando que se seque si es posible o cubriéndola con algo húmedo para proteger la zona si es necesario. Debe evitarse tocar cualquier llaga en la boca o los ojos.  

Se pueden utilizar enjuagues bucales y gotas para los ojos siempre que se eviten los productos que contengan cortisona. Un antiviral que se desarrolló para tratar la viruela (tecovirimat, comercializado como TPOXX) también fue aprobado para el tratamiento de la viruela del mono en enero de 2022.