El Partido Liberal Constitucionalista (PLC) arrastra un pasado de pactos y corrupción. Aunque el caudillo Arnoldo Alemán fue desbancado por María Haydée Osuna, nada cambió en esta agrupación política que en los noventa se convirtió en una verdadera fuerza y que con la casilla número uno llevó a dos a la Presidencia, un marcador relevante para un país que entonces empezaba el camino hacia la democracia. 

Bajo el paraguas del PLC, Walter Espinoza participa en las votaciones organizadas por el régimen de Daniel Ortega. Aunque en su discurso niegue ser de un partido colaboracionista y se diga antidictadura, esta organización liderada por María Haydée Osuna, carga el peso de haber patrocinado la anulación de la personería jurídica del partido Ciudadanos por la Libertad (CxL), consumada por el Consejo Supremo Electoral (CSE) el 6 de agosto de 2021.

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En esta conversación con DESPACHO 505, que forma parte de una serie, se defiende de los señalamientos  de “zancudismo”. Dice que no busca legitimar al régimen de los Ortega-Murillo, pero llama a la población a “votar en libertad”, ignorando la represión que ejecuta la Policía Orteguista contra la oposición. Es más, clama  a la comunidad internacional que reconozca los resultados de las votaciones que se llevarán a cabo el próximo 7 de noviembre.

Nacido en el barrio Edgard Lang, del Distrito II de Managua, Rosales es el comodín de Osuna tras la renuncia a la candidatura presidencial del empresario rivense Milton Arcia. Los inicios en la política y su llegada al PLC datan del 13 de noviembre de 1995, cuando se afilió a esta agrupación.

Un señor de nombre Nicolás Narváez lo convenció de incorporarse al PLC, en una época en la que subsistía de la venta callejera. El hombre que a las 4 de la mañana salía a vender el diario La Prensa al semáforo de El Guanacaste, al suroeste de Managua, se convirtió en concejal de la capital en 2012 y luego diputado en 2016. 

Espinoza es licenciado en Administración de Empresas y asegura que conoce “las necesidades del pueblo”. “Sabemos dónde nos está chimando el zapato. Este es mi enfoque principal, pensar en las familias nicaragüenses. No es pensar en partido político ni personas en particular sino en todos los nicaragüenses”, dice.

El PLC viene de más a menos. Los resultados del 2011 fueron catastróficos, según sus propias palabras, en el 2016 no fueron alentadores. ¿Cómo piensan revertir esa situación y cómo piensan desafiar el poder a Daniel Ortega?

Los resultados del 2016 fueron menos del 5%. Hoy no se debe pensar en Walter Espinoza, no se piensa en un candidato ni en un partido político. Estamos trabajando duro dentro del PLC porque queremos ser la opción que una vez fuimos. Por eso queremos construir con credibilidad este nuevo partido. Somos un partido de principios, respetamos nuestra Constitución, respetamos las leyes. Somos divulgadores de la democracia y la verdadera libertad. 

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Por eso decimos que no hay que pensar en un candidato ni un partido político sino pensar en Nicaragua. Por eso decimos que Nicaragua es primero. No podemos quedarnos mirando al pasado como estatuas de sal. Debemos reflexionar y hacer conciencia que queremos derrotar al único adversario que tenemos. Solo queda que cada uno de nosotros reflexionemos y hagamos conciencia que la única opción es la casilla uno para que derrotemos a Daniel Ortega y al Frente Sandinista.

Los partidos políticos que se han sumado al actual proceso electoral están siendo criticados porque están legitimando un proceso electoral fraudulento y con ello legitiman a la dictadura de Daniel Ortega. ¿Usted está legitimando a la dictadura?

No podemos legitimar algo donde nosotros queremos una democracia, estamos bajo un derecho constitucional como lo hubiera hecho cualquier partido político. Cualquier partido político llamado demócrata estuviera participando en este proceso.

No podemos estar viendo hacia el pasado, cerremos filas. No estamos legitimando al régimen, vamos a legitimar cuando triunfemos el próximo 7 de noviembre. Ya sabemos que el CSE es del Frente Sandinista, ya lo sabemos. La CSJ, es del FSLN, el Poder Legislativo es lo mismo, y ¿por qué no podemos ser nosotros ahora? ¿Por qué no va a ser la familia demócrata que asuma esa responsabilidad ahora? Votemos por la verdadera libertad que necesitamos, contra todas las angustias del pueblo de Nicaragua. Todos los políticos debemos hacer conciencia que no se trata de legitimar sino de decirle ¡basta ya a Daniel Ortega!

¿Usted cree que esta campaña electoral es normal? ¿Cree que el proceso ofrece garantías de credibilidad y legitimidad?

La legitimidad la vamos a hacer todo el pueblo nicaragüense. Ya sabemos que no estamos compitiendo con madre Teresa de Calcuta. Lo tenemos claro. Sabemos cómo trabaja esta gente (FSLN), pero no podemos quedarnos de brazos cruzados. No debemos, es una obligación que tenemos todos los nicaragüenses sabiendo que tenemos un poder en las manos. Las familias nicaragüenses tienen en sus manos el instrumento principal para escribir una nueva historia y el destino de Nicaragua.

Yo hago las preguntas: ¿Qué quiere el pueblo nicaragüense? ¿Queremos democracia, libertad, garantías, progreso, credibilidad, inversiones, fortalecimiento de la economía, estabilidad política y ser socialmente justos? Este es el momento. Nicaragua es nuestra herencia, nadie es dueño, todos somos los dueños. Por eso el pueblo está obligado, deberían todas las familias, salir a votar masivamente. Solo hay dos opciones: el camino del cambio que está encabezado por mi persona, que ofrezco democracia, paz y libertad y lograr la economía que necesitamos o simplemente te quedás en tu casa con los brazos cruzados, diciendo no vayas a votar, que no hay por quién votar.

En algunas decisiones legislativas se ha visto a la bancada del PLC votando con la bancada del FSLN. Muchas decisiones se han tomado con el apoyo del PLC. ¿Es usted un candidato zancudo?

Desde luego que no. Es que aquí vamos a ganarle al Frente Sandinista. Este partido pudo haber tenido todos sus errores, y yo los estoy cargando, estoy consciente de eso y hoy es mi cruz, pero esa cruz nos llevó a una fortaleza. Hoy está la mano poderosa de Dios.

Todo lo que hemos vivido en Nicaragua ha sido un castigo para que reflexionemos y hagamos conciencia. Hoy con fé y esperanza el Señor nos está dando la oportunidad de cambiar la historia de Nicaragua. Desde que entramos como diputados dijimos que íbamos a votar a favor de leyes que beneficien al pueblo de Nicaragua, pero todas aquellas leyes que le hacen daño al pueblo, hemos votado en contra. 

No se ha dicho, no se divulga que el PLC votó en contra de leyes que hoy tienen a muchos nicaragüenses, a muchos políticos, a muchos demócratas donde están (en la cárcel), por leyes que el FSLN aprobó donde el PLC votó en contra, así que no nos pueden decir que nosotros hemos favorecido el Gobierno. Hemos votado a favor de leyes que han beneficiado al pueblo, pero en contra de leyes que le hacen daño.

Algunos países de la comunidad internacional han dicho que no van a conocer los resultados del actual proceso electoral. ¿Por qué el PLC y Walter Espinoza se empeñan en continuar en un proceso que no tendrá legitimidad ni reconocimiento?

Lamento mucho esa opinión, deberían, realmente. Si ellos están conscientes que en Nicaragua no tenemos democracia, no hay libertad, ni libertad de expresión, deberíamos de reconocer. Imagínese que el pueblo nicaragüense está decidido a escribir esa nueva historia y Walter Espinoza va a ganar estas elecciones. Yo quiero ver a estos países hermanos, amigos, si no van a reconocer el día que yo gane estas elecciones sabiendo que aquí van a estar las puertas abiertas, con una administración llena de credibilidad para atraer las inversiones. Necesitamos que nos apoyen.

¿Qué piensa de la corrupción estatal?

Cero corrupción en mi Gobierno. Yo sé que sucede.

¿Qué opina sobre las restricciones que ha impuesto el CSE a los partidos políticos en la actual campaña?

Esto lo han hecho para beneficiar a un partido político, definitivamente. Hemos dicho en la Asamblea Nacional que el Gobierno ha sido irresponsable en la atención a la pandemia del Covid-19 y no le han dado el mérito necesario ni las medidas necesarias. Nosotros ya habíamos decidido tomar medidas, pero independientemente que nos bloqueen la campaña, el pueblo va a salir a votar y cambiar la historia.

¿Cree que están en un proceso electoral justo ante el FSLN?

La diferencia la tiene que hacer la familia nicaragüense votando. Sabemos que estamos frente a un monstruo , frente a un Goliat, pero es más fuerte un David que está protegido por la mano de Dios. 

¿Las protestas sociales del 2018 fueron justas y legítimas?

Los nicaragüenses estamos acostumbrados a vivir en democracia, en libertad, en libertad de expresión, y en la historia de Nicaragua hemos visto tantos procesos hasta que el pueblo pone un ¡basta ya! Justo o no justo, quieren libertad y democracia y es lo que buscamos y la oportunidad la vamos a tener el 7 de noviembre.

Candidato, no contestó la pregunta, ¿Fueron justas las protestas del 2018?

Justas por el cambio, sí. Pero no fueron justas por golpear la economía de nuestro país y para las familias nicaragüenses.

¿Cree que hay terrorismo en Nicaragua?

No. Aquí lo que necesitamos es democracia. El único terrorismo lo puede hacer el Gobierno que no permite la libertad que necesita el pueblo.

¿Las llamadas leyes represivas son legítimas y justas?

No son justas. Desde luego que no. Aquí necesitamos libertad y no cerrarle el "pico" a muchos nicaragüenses, como decimos en Nicaragua. No es la forma. Necesitamos credibilidad, una nueva administración para vivir en bienestar y en progreso.

¿Qué opina de los presos políticos?

Lamentamos lo de ellos. No por encerrarlos van a callarlos, siempre va a estar su voz.

¿Deberían estar en este proceso electoral los siete precandidatos que fueron encarcelados por la dictadura?

Yo considero, tal como siempre lo hemos dicho en el PLC, que tenemos que cerrar filas, un solo candidato. No importa que hoy sea yo el candidato. Hubiese sido cualquiera de ellos, de esos siete precandidatos encarcelados). El Partido estaba dispuesto a que fuera cualquiera de ellos el candidato. Las puertas siempre han estado abiertas. Lamentablemente, la parte de los medios de comunicación, la parte mediática no nos ha favorecido, pero nosotros siempre hemos dicho que cerremos filas, que fuéramos con un solo candidato, una sola unidad. Nosotros tenemos el tendido electoral.

¿Hay dictadura en Nicaragua?

Desde luego. Cuando yo sea el Presidente de la República, por cinco años fui electo, cinco años nada más. No va a existir la reelección. Pero para lograr todo esto, tenemos que ser conscientes que necesitamos la mayoría en la Asamblea Nacional.

¿Usted ordenaría una investigación independiente sobre los crímenes del 2018?

Claro, por supuesto que sí. Necesitamos demostrar porqué sucedieron tantas muertes.

Las tres principales promesas electorales de Walter Espinoza.

Yo tengo cinco ejes principales, pero voy a mencionar tres: estar políticamente estables, todos los nicaragüenses. Socialmente justos y económicamente fuertes para no estar como un país subdesarrollado. Estamos cumpliendo 200 años de vida independiente y seguimos siendo pobres y dependientes. Lo vamos a lograr con los países hermanos que nos vengan a apoyar.